Uno de los aspectos más importantes en las últimas generaciones de todos los modelos es la personalización, algo que Toyota tiene en cuenta desde hace tiempo con su división TRD –Toyota Racing Development- y con la que ha añadido un poco de ´picante´ al Lexus RX. De esta forma, el SUV premium japonés recibe en su catálogo una serie de modificaciones posibles que le dan una imagen más agresiva.
Los paragolpes incluyen faldones específicos, al igual que las taloneras, y las llantas pasan a ser de 22 pulgadas y 13 radios. Sin embargo, la marca asegura que también mejora dinámica y prestacionalmente, pues reduce la resistencia aerodinámica mediante la optimización del flujo de aire, influyendo igualmente en la estabilidad del vehículo. Además, integra en ambos ejes los amortiguadores longitudinales deportivos Performance Damper.
El inconveniente es que este ´pack´ no está disponible en nuestro país –al igual que otra versión que no sea la híbrida de 313 CV-, y ni siquiera se sabe si algún día llegará. En cualquier caso, aunque no se ha anunciado aún su precio, éste podría superar los 10.000 euros.