Subaru acaba de realizar la pre-presentación del la próxima generación del Forester, un todocamino grande (de 4,63 metros de largo) que se comenzará a vender en otoño de 2019.
Se trata de la quinta generación del Forester, y sustituye a la actual, presentada en el año 2012 y actualizada en 2016. A pesar del parecido estético, se trata de un modelo completamente nuevo, con una plataforma distinta y que oferecerá exclusivamente con una motorización: el nuevo motor boxer de 2.0 litros y cuatro cilindros que ahora incorpora un sistema híbrido y se denomina e-Boxer (aunque en España, el nombre oficial de esta tecnología va a ser ECO-Hybrid).
Como todos los Subaru (a excepción del especial GT86), el nuevo Forester cuenta con el sistema de tracción total permantente Symmetrical All Wheel Drive. Subaru ya admite pedidos, y los precios, en función del equipamiento, oscilan entre los 32.450€ y los 36.650€.
Con 4,63 metros de largo, 1,82 m de anchura y 1,73 m de altura, el Forester se sitúa por tamaño a la par de modelos híbridos como como el Honda CR-V o el Toyota RAV4, así como de todocaminos con mecánica convencional como el Mazda CX-5.
Por fuera, el Forester no es muy diferente del modelo actual. La carrocería tiene un aspecto más musculoso, centrándose los principales cambios en unos faros algo más prominentes, unas aletas más musculosas, una calandra con un diseño más limpio y unos pilotos traseros con un diseño partido (parte de la óptica está integrada en el propio portón, lo que ha permitido incrementar levemente la anchura de la boca de carga).
En cuanto a las dimensiones, el nuevo Forester es muy parecido a su predecesor. La carrocería ha crecido en 15 milímetros, mientras que la batalla (o distancia entre ejes) lo ha hecho en 30 milímetros (hasta los 2.670 mm), lo cual ha redundado (según Subaru) en un incremento del espacio libre longitudinal para las plazas traseras de 33 milímetros.
Finalmente, las cotas todoterreno han empeorado ligeramente, aunque no se trata de nada preocupante. La distancia libre al suelo se mantiene en 22 centímetros (bastante buena), pero el incremento de la distancia entre ejes, así como del voladizo delantero (en 10 milímetros) ha reducido el ángulo ventral y el de ataque delantero hasta los 20 y los 21 grados respectivamente (respecto de los 25º y 26º anteriores). A cambio, el ángulo de salida ha pasado de 23º a 26º.
El interior del Forester se ha modernizado bastante respecto de la anterior generación (más de lo que puede parecer en las fotos). La calidad de los materiales y los ajustes son bastante buenos, aunque persisten unos pocos mandos que conservan el típico aspecto pintoresco y algo anticuado (en comparación con el estilo habitual de los modelos europeos) de los coches japoneses.
Los principales cambios se centran en el aspecto y funcionalidad de las pantallas. Sigue habiendo tres (una central, otra en la parte superior del salpicadero y otra en la instrumentación), pero ahora son más grandes, en color, con mejor resolución y manejo. Sobre la visera de la pantalla central superior encontramos la cámara y los leds infrarrojos del sistema de monitorización del conductor (o DMS), del que hablaremos más adelante.
La habitabilidad trasera es buena, al igual que la capacidad del maletero, que ha crecido levemente, pasando de los 505 a los 509 litros. Eso sí: el nuevo sistema híbrido se ha traducido en la supresión de la rueda de repuesto; un detalle que puede resultar delicado para quien circule por caminos con cierta frecuencia.
En Europa, este Forester se va a comercializar con una sola mecánica, denominada a nivel internacional por Subaru e-Boxer y ECO-Hybrid por parte de Subaru España. Durante el resto de este artículo nos vamos a ceñir a esta primera denominación de e-Boxer.
El motor e-Boxer es una combinación de un motor bóxer de dos litros y cuatro cilindros, una caja de variador continuo o CVT de tipo Lineartronic, un motor eléctrico de 12,3 kW de potencia máxima y el sistema de tracción total permanente Symmetrical AWD de Subaru.
Comenzando con el motor 2.0 bóxer (código interno FB20), conserva la cilindrada de 1.995 cm3 del actual, pero la compresión aumenta de 10.8:1 hasta 12,5:1, y adopta un sistema de inyección directa. La cifra de potencia máxima no cambia (150 CV), pero sí lo hace el régimen de potencia máxima, que pasa de las 6.200 rpm a una horquilla de 5.600 a 6.000 rpm.
La caja de cambios sigue siendo la Lineartronic TH58. Se trata de una caja de tipo CVT, dotada de dos poleas de diámetro variable que permiten generar infinitas relaciones de cambio dentro de una apertura (relación entre la marcha más corta y la más larga) de 7.0. Además, mediante las levas del volante es posible escoger entre siete relaciones fijas virtuales (en lugar de las seis disponibles en el anterior Forester).
En la parte trasera de la caja Lineartronic, y atacando el eje primario, se ha montado un motor eléctrico trifásico asíncrono que es capaz de proporcionar hasta 12.3 kW de potencia y 65 Nm de par. Este motor está alimentado por una batería de 118 voltios situada en la parte trasera. Esta configuración permite al Forester disponer de propulsión 100% eléctrica, aunque con bastantes limitaciones.
La combinación entre la baja potencia del motor eléctrico, la reducida capacidad de la batería y el hecho de que dispositivos como el compresor de aire acondicionado no se hayan electrificado se traducen en que el Forester no se mueve con mucha frecuencia en modo 100% eléctrico; sólamente cuando se acelera poco y en el exterior no hace mucho calor.
En cuanto al peso del sistema, la incorporación del e-Boxer supone un incremento en peso de 110 kilos, de los cuales 50 descansan sobre el eje delantero, y los otros 60 restantes sobre el eje trasero. Gracias a su incorporación, el reparto de pesos ha mejorado levemente, desplazándose un 2% hacia el eje trasero (el reparto del nuevo Forester es 60/40 delante/detrás). Aun no disponemos de una cifra homologada de peso, pero rondará los 1.550 kilos.
El segundo es una auténtica primicia mundial, y se trata del sistema de monitorización del conductor. Este sistema emplea una cámara montada en la visera de la pantalla central superior y que es capaz de detectar tanto el parpadeo como la dirección de la mirada del conductor y la dirección hacia la que apunta su cara.
Además, si el conductor está distraído y el coche precedente se acerca deprisa, las advertencias ocurren antes. Finalmente, este sistema DMS (por Driver Monitoring System) es capaz de memorizar los rasgos faciales de hasta cinco conductores, identificándolos y ajustando todo a su gusto en cuanto suben al coche.
Como resultado, no tenemos auténticas sensaciones de conducción, sino simplemente unas leves impresiones sobre qué tal va se comporta el producto. La parte buena es que también tuvimos la oportunidad de conducir el Forester actual en las mismas condiciones.
Sobre asfalto, el comportamiento del Forester ha experimentado un avance notable. El tacto de la dirección es más directo, hay menos balanceo y es un coche mucho más fácil de conducir y con un tacto más parecido al de una berlina. Además, la incorporación del motor eléctrico reduce notablemente el ruido proveniente del motor, suavizando una de las características desagradables de la caja Lineartronic (y de cualquier CVT): el desacople entre el régimen de giro del motor y la velocidad real del vehículo.
Finalmente cabe destacar que el Forester es un todocamino bastante auténtico, con unas buenas cotas y, sobre todo, con unos amplios recorridos de suspensión... de manera que probablemente sea una opción mejor que un Toyota Rav4 o un Honda CR-V para quien vaya a circular por pistas con relativa frecuencia.
El nuevo Forester está disponible, en el acabado más básico, que se denomina Sport Plus, desde 32.240 euros, mientras que la versión más acabada, la Executive Plus, cuesta desde 36.650 euros. La versión intermedia, que está dotada del sistema de seguridad de supervisión del conductor (y que seguramente sea la opción más equilibrada) cuesta 35.150 euros.
Motor | 2.0 bóxer atmosférico gasolina híbrido |
Potencia | 150 CV de 5.600 a 6.000 rpm |
Par | 194 Nm a 4.000 rpm |
Velocidad máxima | n.d. |
0-100 km/h | n.d |
Peso (aprox) | 1.550kg (7,67 kg/CV) |
Precio (Sport Plus) | 32.450 euros |
Cambio | Automático, CVT |
Tracción | A las cuatro ruedas |
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