Y energía 100% renovable

Toyota construirá la primera estación del mundo de generación de hidrógeno

Antonio Moraleja
Antonio Moraleja
La planta de Toyota que recibirá el nombre de Tri-Gen y estará ubicada en California (Estados Unidos) generará hidrógeno para los vehículos de pila de combustible.


Toyota sigue dando pasos adelante en su estrategia hacía una movilidad más ecológica y su último megaproyecto es la contrucción de la primera estación del mundo para la generación de hidrógeno y energías 100% renovables mediante la utilización de para respaldar sus operaciones en el Puerto de Long Beach, en Los Ángeles. Además, la planta Tri-Gen aprovechará los residuos biológicos procedentes de la actividad agrícola en California para generar agua, electricidad e hidrógeno.

Cuando entre en funcionamiento en 2020, Tri-Gen generará unos 2,35 megavatios de electricidad y 1,2 toneladas de hidrógeno al día, suficiente para suministrar energía a unos 2.350 hogares de dimensiones medias y para que circulen cerca de 1.500 vehículos. La planta de generación eléctrica será 100% renovable y suministrará energía para las operaciones de Toyota Logistics Services (TLS) en el Puerto de Long Beach, convirtiéndose así en las primeras instalaciones de Toyota en Norteamérica que funcionarán al 100% con energía renovable.

Además de servir como prueba de concepto de la generación local de hidrógeno 100% renovable a gran escala, la planta proporcionará energía a todos los vehículos de pila de combustible Toyota que circulen por el puerto, incluidos los Toyota Mirai y el camión de gran tonelaje movido por pila de combustible que se presentó hace unos meses.

Para hacer posibles esas operaciones de repostaje, Toyota también ha construido una de las mayores hidrogeneras del mundo, con la ayuda de Air Liquide. La planta supera con creces las estrictas normas de calidad del aire de California con el objetivo reducir emisiones y mejorar la calidad del aire en esa zona de EE.UU.

La planta de Tri-Gen ha sido desarrollada por FuelCell Energy con el apoyo del Departamento de Energía de Estados Unidos y diversas entidades de California, como la Junta de Recursos del Aire de California, el Distrito de Gestión de la Calidad del Aire de la Costa Sur, el Distrito de Saneamiento del Condado de Orange y la delegación de la Universidad de California en Irvine, cuya labor de investigación ha ayudado a desarrollar la tecnología central.