La historia del Volkswagen Beetle es de las más curiosas y documentadas de la historia del automóvil. Su producción oficial data de 1945 (con el nombre de VW Liomusine Type 1), cuando terminó la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, el proyecto original para fabricarlo (llamado KdF-Wagen) se remonta a 1938… El estallido de la guerra obligó a la fábrica alemana de Wolfsburg a convertirse en una factoría de armas, por lo que entre unas cosas y otras, entre 1939 y 1945 apenas se hicieron 630 unidades.
A partir de fin de la guerra, el Beetle fue un caso de absoluto éxito, con exactamente 21.529.464 unidades fabricadas. Y este número tiene importancia si hablamos del nuevo Milivié 1, ya que sólo existirán 22 unidades, una por cada millón de Beetle manufacturados (redondeando).
El Milivié 1 «es una celebración única del vehículo más querido del mundo. El vehículo representa una fusión de todo lo que el conductor analógico desea, mezclado con una integración de la tecnología más avanzada», describen desde la compañía.
Así es el Milivié 1
Para fabricar cada uno de los Milivié 1, se escogen Beetle 1303, fácil de distinguir porque es el único con parabrisas abovedado. El equipo de Milivié ha seleccionado este modelo como base para una evolución total, donde se emplearán más de mil horas de trabajo e ingeniería en cada unidad, lo que da como resultado un coche que comparte poco más que la sección metálica de la carrocería y el suelo con el donante (incluso estos componentes también están muy modificados con respecto al coche original, según los responsables de la firma).
El chasis se ha mejorado para convertir la experiencia de conducción en algo único, y poder sacar el máximo partido a la mecánica… refrigerada por aire. La cadena cinemática es un cuatro cilindros planos de 2,28 litros con doble carburador Weber, que se adaptará a las exigencias medioambientales que requiera la legislación del país de cada cliente. Por su parte, la transmisión es una ZF automática de 4 velocidades totalmente modificada para ofrecer una conducción atractiva y emocionante (se adapta un sistema para manejar de manera manual).
El concepto del coche es tan original como su ejecución. Su fundador, el ingeniero británico Jonathan Engler, tenía desde hace tiempo el deseo de construir su propia marca de coches, pero con una diferencia; «quería fabricar un coche que creara una impresión social positiva y relajada, ya que a menudo ha sido testigo de los celos y la negatividad que puede conllevar la posesión de un vehículo de alta gama». Esta perspectiva permite que los diseños de Engler combinen un aspecto exterior sutil y discreto, pero cuentan con todos los avances tecnológicos de estos tiempos, como se suele hacer en otros restomod.
Engler ha creado un equipo de diseñadores e ingenieros que, junto a 44 proveedores de componentes y procesos de primer nivel, tiene la misión de sintetizar 70 años de historia de la refrigeración por aire y analizar los cerca de 78.000 cambios que realizó VW durante todos los años que estuvo en producción el Beetle. Para el equipo de Milivié, la historia de Escarabajo original es una historia inacabada que merece una evolución final, respetuosa pero totalmente moderna, para marcar el último capítulo.
Para crear un coche que no sólo es accesible en estilo, sino exclusivo en cada uno de sus detalles, el equipo de Milivié se remontó no sólo al amplio ADN del vehículo donante, sino también a una evocación más amplia de los clásicos refrigerados por aire. Para complementar su evolución, se tomaron referencias del estudio para rendir homenaje a los primeros diseños de Porsche, lo que les permitió respetar y adoptar la visión de diseño del creador original del coche: Ferdinand Porsche.
Los elementos de la línea de la carrocería del 904 desembocan en la distintiva cola de pato; los ecos del 935 en las puntas de los escapes; y los del 956 en los guardabarros y parachoques traseros de corte alto. El 964 inspira las hendiduras cóncavas de los guardabarros traseros; el parachoques trasero de ángulo sutilmente invertido del tipo 64 da lugar a una parte trasera más alta y larga. Y la lista continúa. El impresionante Porsche 718 RSK influye en el elegante y dominante elemento de diseño horizontal de la máscara frontal; y el coupé 356 Gmünd de 1949 da lugar al splitter bicolor, junto con la salidas de la ventilación del RS Spyder.
La colocación ligeramente más baja y centrada de los faros e intermitentes actuales se inspira en la cultura de los rallyes y los buggies del 1303 donante… y evoca una vez más al Porsche 718. Por su parte, los faros cuentan con contornos ovales estirados similar a los faros del Porsche RS Spyder. La ejecución de un diseño meticuloso ofrece una silueta que resulta inmediatamente familiar, mientras que los detalles están pensados para atraer a los conductores más apasionados, y así los examine más de cerca.
Un habitáculo acorde al exterior
El interior del Milivié 1 es un entorno claramente contemporáneo. Sin embargo, aunque el aspecto es moderno, encontramos guiños a modelos del pasado, sobre todo del Beetle. El salpicadero, más grande y profundo, con los compartimentos de almacenamiento abiertos, recuerda al de los primeros prototipos del VW Escarabajo original de 1938. Otro detalles son que los paneles de las puertas tienen elementos familiares del emblemático Porsche 911.
Las dos pantallas de visualización, enmarcadas en una carcasa de madera de pino hecha a mano, se sitúan en el salpicadero con una superficie lisa a la izquierda y a la derecha, de forma similar al Beetle 1303. Los sistemas de información al conductor y de infoentretenimiento están representados en dos pantallas de 12,3″ para las que el equipo de Milivié ha desarrollado un software a medida. Las tres opciones de visualización pueden cambiarse simplemente deslizando el dedo. Los diseños de las pantallas de los instrumentos incluyen una pantalla moderna centrada en la representación de la información esencial a través de formas y colores dinámicos; un diseño clásico que refleja los primeros instrumentos analógicos visto en los primeros Beetle; y, por último, una pantalla de datos ampliada que muestra las lecturas de todos los sensores del coche.
El habitáculo cuenta con cuatro asientos individuales y calefactables, con una consola central entre cada fila de asientos que incorpora carga inalámbrica, un enchufe de 220V y puertos USB/USBC. Cada comprador podrá elegir los materiales con los que tapizar el interior y el estudio de Bill Amberg (de origen británico y especializado en el tratamiento del cuero desde hace más 30 años) diseñará una maleta a medida utilizando los mismos para que vaya a juego.
Otros elementos a destacar dentro del equipamiento del Milivié 1 son el aire acondicionado, sensores de párking con cámra trasera, limparabrisas automático, dirección con asistencia eléctrica y una aplicación para el smartphone desde controlar parámetros como la autonomía, la temperatura interior o el navegador.
Quiero uno. ¿Qué debo saber?
Cada Milivié 1 se presenta al cliente como «un proyecto colaborativo», con un amplio programa de conserjería que permite una experiencia verdaderamente a medida. Cada uno de los 22 coches que se fabricarán se adapta y configura individualmente para la futura ubicación y estilo de conducción de su propietario.
Las primeras reservas del Milivié 1 ya están abiertas, con un precio de entrada por encargo que comienza en los 570.000 euros. El primer coche se entregará en julio de 2023, y la serie se entregará máximo en mayo de 2025.