Los coches eléctricos con batería, los que ya conocemos y se van haciendo más y más comunes cada día en nuestras calles; no son el único camino hacía las 0 emisiones. Un objetivo que promueve la Comisión Europea al haber prohibido la comercialización en la UE de cualquier turismo o TT nuevo con emisiones a partir del 1 de enero de 2035.
Frente a estos coches eléctricos a batería, existe otra tecnología: la de la pila de combustible, que genera electricidad para un motor eléctrico descomponiendo hidrógeno. Toyota, con el Mirai; y Hyundai, con el Nexo; ya cuentan en su gama con vehículos de hidrógeno fabricados en serie. Y, en pocos años, BMW podría unirse a este selecto grupo, lanzando a producción el iX5 Hydrogen.

Este prototipo se presenta ahora en sociedad tras cuatro años de desarrollo; tras lo cual la marca alemana cederá decenas de estos vehículos a distintos tipos de usuarios con el objetivo de recolectar datos y conocimientos en condiciones de uso reales. Desde BMW creen firmemente en esta tecnología como una opción de futuro: «El hidrógeno es la pieza que falta en el rompecabezas de la movilidad sin emisiones, señala Oliver Zipse, Presidente del Consejo de Administración de BMW AG: “una tecnología por sí sola no bastará para lograr una movilidad climáticamente neutra en todo el mundo.»

Coches eléctricos de hidrógeno: ¿cómo es el BMW i5X Hydrogen?
De hecho, BMW lleva colaborando con Toyota (marca a la que compra las pilas de combustible individuales, que luego ensambla en su propio centro en Múnich, en Alemania) en la investigación de vehículos de hidrógeno desde 2013 y este BMW iX5 Hydrogen ya se presentó al público en el Salón del Automóvil de Fráncfort de 2019 para, en 2021, quedar a disposición de los invitados del Salón del Automóvil de Múnich como coche lanzadera.
Este prototipo, desarrollado sobre la base del último BMW X5 y ya en última fase de estudio, equipa una pila de combustible que genera 125 kW/170 CV, que se combinan con el sistema eDrive de quinta generación de BMW (incluye el motor eléctrico, la transmisión y el software de gestión) para generar una potencia máxima de 295 kW / 401 CV. Además, durante las fases inercia y frenado, el motor de este iX5 Hydrogen también actúa como generador y devuelve la energía a una batería específicamente desarrollada para este modelo.

Gracias a esta tecnología, a un consumo de hidrógeno de 1,19 kg cada 100 km y a unos depósitos de hidrógeno de 6 kg (que se recargan entre tres y cuatro minutos), el BMW iX5 Hydrogen logra una autonomía homologada según el ciclo WLTP de 504 km. Y ello con unas prestaciones más que suficientes: una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de seis segundos y una velocidad máxima superior a 180 km/h.
¿Llegará este BMW iX5 Hydrogen a la producción?
El BMW iX5 Hydrogen ya se está fabricando en la planta piloto que el Grupo BMW tiene en su Centro de Investigación e Innovación (FIZ) de Múnich. Y, prácticamente, es un coche que ya puede rodar por carretera legalmente y con todo el refinamiento propio de la marca.

Eso sí, en los planes de BMW, por ahora, no entra que los coches eléctricos de hidrógeno sustituyan a los coches eléctricos a batería; al menos por ahora. Y es que desde la marca señalan a estos coches de hidrógeno como “como un complemento potencial de la tecnología de propulsión utilizada por los vehículos eléctricos de batería”.
Por otro lado, los responsables de BMW no son precisos con una posible fecha de comercialización de estos coches eléctricos de hidrógeno, algo que señalan, podría ocurrir “en una década”. Y si bien parece que la tecnología está lista, podría deberse más a una falta de ‘hidrogeneras’ y al coste actual del hidrógeno para el usuario final (en torno a 10 euros por litro), una cantidad que responsables de empresas de gas señalan a Autofácil que podría rebajarse a “3 ó 4 euros el litro en los próximos años”.
