El fabricante alemán de equipamiento ZF ha mostrado el innovador cinturón de seguridad que acaba de desarrollar, que es capaz de adaptarse al cuerpo de los pasajeros del coche, tanto del conductor como de todos sus acompañantes.
ZF ya ha desarrollado unos cinturones calefactables que consiguen reducir el consumo de energía en los vehículos 100 % eléctricos. Ahora, este fabricante, desde su división de seguridad pasiva ‘Passive Safety Systems’, ha logrado idear un cinturón de seguridad que logra adaptarse al cuerpo de cada ocupante en caso de sufrir un accidente de tráfico para minimizar la gravedad de sus consecuencias al máximo.
Cómo funciona este nuevo cinturón de seguridad
Aunque parece que el cinturón de seguridad es el gran olvidado en cuanto a la introducción de avances sobre el mismo, este invento llega para desmentir esta teoría. Pero, ¿cómo funciona?
En la actualidad, en caso de que vayamos a sufrir un golpe, el cinturón de seguridad del coche se tensa alrededor del cuerpo debido a la actuación de los pretensores. De esta forma, se reduce la holgura del cinturón para después liberarlo de manera controlada y evitar lesiones.
Por el momento, para realizar las pruebas de seguridad se utilizan unos dummies estándar, aunque se ha ido progresando en este apartado y, hoy en día, existen dummies de mujeres y de niños.
Sin embargo, en un futuro, todo parece indicar que las pruebas de choque EuroNCAP exigirá una protección aún mayor para cada ocupante del vehículo de forma individual. Y, por este motivo, desde ZF indican que han creado este nuevo cinturón de seguridad.
Para el funcionamiento de este nuevo cinturón de seguridad, ZF incorpora diferentes sensores y cámaras para adaptar su respuesta en caso de impacto lateral o frontal. En concreto, un sensor se encargaría de calcular en tiempo real la longitud de enrollado y salida del cinturón para estimar la corpulencia y morfología de la persona y adaptar la fuerza con la que actuaría el cinturón.
Así mismo, unas cámaras instaladas en el interior del vehículo controlarían el número de ocupantes, su tamaño y el asiento en el que van. Pero esta tecnología va un paso más allá, puesto que también sería capaz de ver la orientación del cuerpo de la persona; como, por ejemplo, si se ha girado para manejar la pantalla central.
Así, según ZF, este cinturón de seguridad es capaz de «ofrecer a personas pequeñas y ligeras una protección individual mejor adaptada en caso de accidentes moderados (con velocidades de impacto de hasta 35 km/h); por ejemplo, a los niños que viajan en el asiento trasero. Y también puede beneficiar a las personas mayores, que tienen un mayor riesgo de sufrir lesiones debido a los cambios en la estructura ósea que dependen de la edad. Además, el sistema mejora potencialmente la seguridad de los pasajeros más grandes en accidentes por sobrecarga (con velocidades de impacto superiores a 56 km/h)».