El nuevo Mazda2 alberga mucho más que un nuevo diseño, inspirado en la línea KODO que marca los productos de la marca japonesa. Por ejemplo, el chasis SKYACTIV presenta profundas modificaciones con respecto al empleado en el anterior modelo, basado en el Ford Fiesta. También la carrocería es mucho más ligera y rígida, realizada con un 65 por ciento de aceros de alta resistencia, frente al 53 por ciento de su antecesor. En cuanto a la rigidez torsional, se ha visto incrementada en un 22 por ciento.
Head-up Display
El Mazda2 es el primer modelo del segmento en ofrecer un sistema Head-up Display. Este dispositivo proyecta información básica para la conducción, dentro del campo de visión frontal del conductor, para no tener que desviar la mirada a la instrumentación. En la pantalla, que se adapta automáticamente a la luz ambiente, se visualizan un máximo de tres elementos a la vez, para no sobrecargarla de información. Puede mostrar la velocidad a la que circulamos, las indicaciones del navegador o el estado de las tecnologías de seguridad activa i-ACTIVSENSE, que aparecen en función de la prioridad; por ejemplo, si hay un aviso de seguridad, aparece inmediatamente, hasta que el peligro ha pasado. Este dispositivo se ofrece únicamente para el acabado más completo Luxury, dentro del Pack Safety, que también incluye el acceso inteligente sin llave, el control de ángulo muerto (BSM), el sistema de alerta de tráfico trasero (RCTA) y el control de luces de largo alcance (HBC). ¿Su precio? Bastante asequible: 700 euros.
Faros Full LED
Otra novedad importante son los faros con tecnología LED para todas las funciones, disponibles por primera vez en Mazda. Solo están disponibles en el acabado Luxury –de serie– y vienen acompañados de las luces diurnas con idéntica tecnología. Entre sus rivales directos, solo el Volkwagen Polo ofrece esta posibilidad; también el MINI, aunque es un modelo considerablemente más caro.
Pantalla táctil o mando satélite
Otro aspecto en el que destaca el Mazda2 es por el manejo de la pantalla central de 7 pulgadas, de serie a partir del acabado Style+. Las diversas funciones se pueden manejar mediante un conjunto de
mandos ubicados entre los asientos delanteros, o bien de manera táctil, a través de la propia pantalla; una dualidad que no es habitual en este segmento.
Motores SKYACTIV
Por último, el Mazda2 emplea dos bloques tetracilíndricos, ambos de 1,5 litros de cilindrada, uno alimentado por gasolina y otro por gasóleo. Destaca el primero, disponible con tres niveles de potencia –75, 90 y 115 CV–, ya que no recurre a la sobrealimentación, como es habitual en el resto de modelos del segmento. Las dos variantes más potentes se caracterizan por ofrecer una relación de compresión muy alta –14,0:1–, muy cercana a la de las mecánicas de gasóleo. Por otra parte, se trata de un bloque derivado del que utiliza el Mazda3, aunque con modificaciones para hacerlo más ligero y compacto; de esta forma, se emplea un sistema de escape más corto, la sincronización de válvulas de admisión es hidráulica, en vez de eléctrica, y la cubierta del motor y una bomba de combustible son más ligeras.