Peugeot 3008: primera prueba

Día lluvioso y gris. Nos hemos desplazado a Bolonia -Italia- para probar uno de los SUV que más expectación ha generado en los últimos tiempos: la segunda generación del Peugeot 3008.
Y no es de extrañar ya que, a simple vista, el nuevo Peugeot 3008 supone un cambio radical respecto a su antecesor; algo que no resulta extraño dado la dura competencia de la categoría con modelos como el Seat Ateca, el Kia Sportage o el Hyundai Tucson. Ahora es más SUV -mide 4,45 m de largo, 1,84 m de ancho y 1,62 m de largo-. También tiene un aspecto más original gracias unas ópticas frontales led con intermitentes dinámicos que imitan la mirada de un felino; o la moldura negra que recorre la zaga de lado a lado que cubren unos pilotos traseros que simulan las garras de un león. Además, la versión diésel 2.0 BlueHDI de 180 CV con la que iniciamos la prueba tiene una estética más dinámica gracias a unos pasos de rueda específicos, unas llantas bitono de 19″ con unos neumáticos 235/50 R19 o a su pintura bitono Coupé Franche -cuesta desde 1.341 euros-.
Más información sobre el Peugeot 3008
El nuevo Peugeot 3008 adapta uno de los puestos de conducción más atrevidos de la categoría: la segunda generación del i-cockpit. Está compuesto por una pantalla táctil de 8″ en la consola central, un pequeño volante elipsoidal y una instrumentación digital de 12,3″ con cinco apariencias diferentes y capaz de mostrar las indicaciones del navegador. En otros Peugeot, se ha criticado el hecho de que la instrumentación quedarse oculta tras el volante; sin embargo, el nuevo 3008 ha mejorado en este apartado.
Además, también llaman la atención los interruptores de la consola central, que, en cierto modo, recuerdan a los de un avión -y que requieren de un pequeño periodo de aprendizaje para manejarlos sin apartar la vista de la carretera-; o la palanca de cambio by wire de las variantes automáticas.
En cuanto a las plazas traseras, son correctas para acomodar dos pasajeros de hasta 1,85 m de alto pero, no resultan especialmente amplias para albergar a un tercer ocupante y no cuentan, por ejemplo, con la banqueta deslizante que sí ofrece un Volkswagen Tiguan. Tal vez esta sea la mayor debilidad del 3008, ya que por calidad de acabado es a día de hoy el mejor Peugeot.
En lo que al maletero respecta, cuenta con 520 litros de capacidad; un piso configurable en dos alturas y se puede abrir con solo deslizar el pie por debajo del paragolpes. Eso sí, las unidades que probamos en la presentación incluían una rueda de repuesto de emergencia.

Peugeot 3008: Así van sus motores
Durante nuestra presentación en Italia pudimos probar brevemente cuatro de los motores del Peugeot 3008. Comenzamos la prueba por la versión más potente de la gama: el diésel 2.0 BlueHDI de 180 CV asociado a un cambio automático de seis velocidades -no hay disponible un cambio manual- y al acabado superior GT. Este motor destaca por su empuje a bajas y la contundencia con la que impulsa al 3008€ que resulta incluso mayor que la del 1.6 THP gasolina de 165 CV -eso sí no es tan silencioso y suave como el gasolina-.
Continuamos la prueba con el motor que será el corazón de la gama el 1.6 BlueHDI diésel de 120 CV que, a día de hoy, es el propulsor diésel estrella de Peugeot. En el Peugeot 3008 se muestra silencioso, ahorrador -sólo gasta 4,0 litros- y capaz de mover con solvencia los 1.375 kilos de peso del Peugeot 3008 como demuestran una aceleración de 0 a 100 km/h en 11,2 segundos y alcanzar 189 km/h.
Por último, terminamos con el Peugeot 3008 gasolina 1.2 PureTech de 130 CV. En marcha, su suavidad y un sonido muy agradable hacen que desde el puesto de conducción sea imposible percibir que se trata de un propulsor de tres cilindros. Al igual que cuando se acelera a fondo. Y es que, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 10,8 y 188 km/h resulta incluso más veloz que el 1.6 BlueHDI de 120 CV.
Por lo demás, pese a ser un SUV, el Peugeot 3008 tan sólo se ofrece con tracción delantera. Aún así, algunas versiones pueden equipar el Advanced Grip Cotrol; un sistema que actúa sobre el control de tracción para aportar un plus de motricidad sobre superficies deslizantes. Tiene cinco modos de funcionamiento Normal, Snow -nieve-, Mud -barro-, Sand -arena- ESP Off e incluye un control de descenso de pendientes y neumáticos M+S.

Viene con un patinete

El Peugeot 3008 ofrece como accesorio un patinete eléctrico plegable -se puede guardar en el maletero- con 12 km de autonomía eléctrica y que es capaz de alcanzar 25 km/h. Sirve para afrontar pequeños desplazamientos en ciudad una vez que se estacione el coche. Se vende como un accesorio por 1.150 euros.
Y además…
Si quieres saber más del Peugeot 3008, la marca francesa organizará una jornada de puertas abiertas del 3 al 5 de noviembre; en la que podrás acudir al concesionario para conocer todos los detalles del nuevo Peugeot 3008.