En numerosas ocasiones os hemos mostrado los posibles fraudes a los que tienes que estar pendientes al comprar un coche de segunda mano. Pero si nos centramos en los coches clásicos este riesgo se incrementa potencialmente. Y es que, al igual que el arte y otros objetos de colección, los coches clásicos representan una inversión sólida, cuyo valor tiende a aumentar con el tiempo. Por ello, es fundamental que el vehículo a adquirir cuente con un historial limpio y bien documentado.
Una investigación reciente realizada por la compañía de datos automovilísticos carVertical revela un problema común que afecta el mercado de coches clásicos: el fraude en cuentakilómetros y los daños pasados.
Los informes de historial generados por usuarios de carVertical a nivel mundial indican que aproximadamente el 25,3 % de los vehículos fabricados antes de 1993 muestran manipulación en los cuentakilómetros. Este tipo de fraude implica que, en promedio, los vehículos que han sido inspeccionados antes de ese año tienen alrededor de 83.000 kilómetros manipulados en sus cuentakilómetros. Además, se observa que a medida que los vehículos envejecen, aumenta la probabilidad de manipulación en los cuentakilómetros; por tanto, los vehículos que tienen entre 28 y 31 años tienen mayores posibilidades de haber sufrido alteraciones en esta área.

Especialmente hay marcas que se ven más afectadas como son Ferrari, liderando la lista con un preocupante 38,9% de coches clásicos con cuentakilómetros alterados, seguido por Honda con un 34,2%, Ford con un 32,6% y BMW con un 31,6%. Mercedes-Benz también se encuentra en la lista, con un 25,9% de coches afectados, mientras que el 20,1% de los modelos clásicos de Porsche revisados también tuvieron retrocesos de kilometraje.
A este hecho hace referencia Matas Buzelis, experto en automoción de carVertical, enfatizando en la gravedad del problema, ya que «uno de cada cinco coches Porsche que tienen más de 30 años de antigüedad tiene el cuentakilómetros alterado. Imagínese las cantidades gastadas en exceso por los coleccionistas y entusiastas curiosos, ya que tales marcas tienen una demanda muy alta en el mercado de automóviles clásicos a nivel internacional».

Uno de los principales problemas a los que se enfrentan aquellos que compran vehículos con el cuentakilómetros manipulado son las consecuencias económicas. Los vehículos antiguos tienden a perder valor con el tiempo debido al desgaste, y esta depreciación está directamente relacionada con su kilometraje. Por lo tanto, comprar un coche sin conocer su verdadero recorrido implica el riesgo de pagar mucho más de lo que realmente vale.
Este hallazgo es especialmente relevante ya que, en busca de piezas únicas y modelos especiales, los compradores de coches clásicos suelen mirar más allá de las fronteras nacionales, lo que subraya la importancia de estar alerta a esta problemática al invertir en un vehículo antiguo.
Ejemplos de fraudes en coches clásicos

Un ejemplo ilustrativo de esta práctica engañosa es el Mercedes-Benz 560 de 1987, que aparentemente había recorrido más de 75.000 kilómetros durante su vida útil, un kilometraje razonable para un coche clásico. Sin embargo, una revisión exhaustiva del historial del vehículo reveló que, en algún momento, había registrado 295.269 kilómetros, lo que equivale a aproximadamente 219.936 kilómetros más de lo que indicaba su última lectura del cuentakilómetros. Incluso si se ignora este pico, el cuentakilómetros había registrado previamente más de 180.000 kilómetros, un número significativamente mayor que el kilometraje reportado hace unos años.
Otro ejemplo que destaca el peligro de esta práctica es un modelo BMW Serie 3 coupé fabricado en 1990. A pesar de que su cuentakilómetros indicaba 123.243 kilómetros, el informe reveló que se había manipulado, ya que entre 2018 y 2020 había recorrido 200.000 kilómetros adicionales. Estas diferencias en el kilometraje pueden tener un impacto significativo en el valor del vehículo, ya que muchos componentes críticos pueden haber llegado al final de su vida útil después de superar los 300.000 kilómetros.
Inspección coches clásicos
Para evitar todos estos problemas es fundamental realizar una inspección minuciosa al comprar un automóvil clásico. Los coches clásicos mantienen su valor debido a varias razones, como su importancia histórica, sus logros en el automovilismo, su diseño icónico y la nostalgia por ciertos períodos de tiempo. No obstante, para sacar el máximo provecho de esta inversión, es esencial examinar a fondo el vehículo antes de adquirirlo. Utilizar el número VIN del automóvil para descubrir su pasado es crucial, verificando si los números de identificación del vehículo (VIN) coinciden en varios lugares del coche.
También sería fundamental solicitar un historial completo de mantenimiento del vehículo es un paso importante, ya que brinda transparencia y autenticidad al proceso de compra. Un historial limpio aumenta significativamente el valor del automóvil en el mercado, ofreciendo a los compradores confianza y seguridad en su inversión.
