Prueba del nuevo Nissan X-Trail 2023: un SUV 100% electrificado

Corría el año 2001 cuando Nissan presentó el primer X-Trail, un automóvil de tipo SUV pero con generosas cotas todo terreno. A lo largo de las generaciones se ha ido aclimatando un poco más a los gustos populares, transformándolo en un coche de un uso eminentemente asfáltico. En su nueva generación, que es la cuarta, recupera un poco ese espíritu de la primera y, además, sufre un vuelco enorme en cuanto a su gama de motorizaciones, donde desaparecen los diésel y se da la bienvenida a la electrificación.
El nuevo modelo mide 4,68 metros de largo, lo que significa que decrece 1 cm respecto a su predecesor. También es 2 cm más ancho y 1,5 cm más alto, además de presentar un aspecto más robusto, más SUV. Y, al igual que sucedía con su antecesor inmediato, tiene muchos lazos con el Qashqai. Se comercializará en versión de cinco o siete plazas. En este segundo caso, se habilitan dos pequeñas butacas en la parte trasera aptas para personas de hasta 1,60 metros de estatura, es decir, más bien para niños.
En el caso del Nissan X-Trail de siete plazas, el maletero se reduce de 575 a 485 litros de capacidad. Cabe mencionar que esos 575 litros son medidos con los asientos de la segunda fila en su posición intermedia (se desplazan longitudinalmente en 22 cm), de manera que, en la práctica, la capacidad de maletero oscila entre 500 y algo menos de 700 litros. Las cinco plazas de la segunda y tercera fila se pueden plegar de forma individual.

Como decíamos al principio, entre sus motorizaciones no hay cabida para el gasóleo y las tres opciones que existen, tienen electrificación de una u otra manera como parte de la estrategia de Nissan, que tiene como meta que, en 2030, el 100% de sus coches estén electrificados. El escalón de acceso lo conforma un bloque 1.5 VC Turbo Mild Hybrid de 163 CV con tracción delantera y cambio XTronic de tipo CVT. Sin embargo, Nissan tiene mayores esperanzas de ventas con las variantes e-Power.
Estas versiones e-Power son eléctricas, si bien conservan el motor 1.5 VC Turbo, pero con distinto cometido, ya que no impulsa las ruedas, sino que actúa como generador para alimentar a la batería que, a su vez, suministra electricidad a los motores. Por cierto, la batería es bastante grande para no tratarse de un híbrido enchufable, pues es de 2,1 kWh de capacidad bruta (1,8 kWh neta). En el X-Trail e-Power estándar la potencia es de 204 CV, que son lo que desarrolla el propulsor eléctrico conectado al eje delantero.
Por encima, el Nissan X-Trail e-Power e-4orce añade un segundo motor eléctrico, ubicado en el eje trasero, que eleva la potencia a 213 CV y que dota al vehículo de tracción total. Tiene un coste de 3.400 euros extra respecto al X-Trail e-Power de tracción delantera. La unidad que hemos podido probar corresponde a esta versión.

¿Cómo va el nuevo Nissan X-Trail?
Probablemente, su mayor virtud sea la suavidad de marcha. Al ser los motores eléctricos los que impulsan al vehículo, el coche transmite mucha suavidad en movimiento y una gran instantaneidad entre la presión que ejerzas sobre el pedal del acelerador y la ganancia de velocidad. También es cómodo y está francamente bien aislado. Es un coche de muy gratas sensaciones en conducción tranquila, si bien cuando demandas potencia, aquello se diluye un poco.
No hay caja de cambio como tal, pero cuando exiges una aceleración intensa, las sensaciones son similares a si hubiera una transmisión de tipo CVT. En esa situación, el motor térmico se pone en marcha y genera ruido de la misma manera que en un coche con cambio de variador continuo. Parece, incluso, que sí está conectado a las ruedas porque sube o baja de revoluciones según tú aceleres más o menos, aunque en verdad sólo actúa como generador.
Sin embargo, sus prestaciones están a buen nivel. El motor eléctrico delantero proporciona 330 Nm de par, a los cuales hay que sumar los 195 Nm que aporta el trasero. Eso significa que el X-Trail e-Power e-4orce puede acelerar de 0 a 100 km/h en unos encomiables 7,0 segundos.

Ahora bien, enseguida te percatas de que el X-Trail no es un coche para ir rápido, sino más bien tranquilo, y eso que en términos de agilidad y dinamismo no raya en absoluto a mal nivel. Es entonces cuando gasta poco (es fácil rondar los 6,5 L/100 km, que es más o menos lo que homologa la marca), cuando se muestra muy suave al volante y cuando resulta francamente confortable. Hay muy poco que reprocharle en estas situaciones.
Si pretendes ir rápido, como decíamos este X-Trail tiene potencia y par para hacerlo, pero entonces las sensaciones se tornan menos agradables. Por un lado, el generador de gasolina funcionando a pleno rendimiento dispara el consumo. Por otro, el ruido que genera y la ausencia de caja de cambio hacen que la experiencia no sea nada estimulante. Pero hablamos de un coche de uso familiar, no lo olvidemos.
Aparte dispone de cinco modos de conducción, entre los que hay uno para nieve y otro para tierra. Pudimos probar este último en un circuito off-road, en el que el X-Trail mostró dotes razonablemente buenas en cuanto a cotas y a gestión de la tracción total, sobre todo teniendo en cuenta que va equipado con neumáticos Michelin Primacy 4, que son de asfalto al 100%. Al no tener ningún elemento de bloqueo, el avance sobre superficie deslizante o sobre cruce de puentes en los que alguna rueda quede en el aire no es el más eficiente, pero cumple más que bien para tratarse de un SUV.

¿Cómo es por dentro el Nissan X-Trail?
Lo cierto es que el X-Trail goza de un nivel de calidad muy alto. Por encima del de la mayoría de rivales generalistas y muy cercano al de las alternativas premium. Se siente bien hecho, hay materiales sintéticos de calidad y la ergonomía es buena, incluso conservando los mandos físicos para la climatización. El interior se parece mucho al del Qashqai, pero la habitabilidad resulta perceptiblemente mayor.
Además, hay mucho hueco portaobjetos. Por ejemplo, bajo el selector de la ‘transmisión’ hay uno habilitado por el hecho de que no haya conexiones mecánicas ahí. También hay otro de doble tapa bajo el reposabrazos central delantero, dos portabebidas en el túnel central y receptáculos de buena capacidad en los paneles de las puertas.

Detrás, donde por cierto las puertas se abren en 85 grados para facilitar el acceso al vehículo, hay tomas de ventilación específicas (el climatizador es de tres zonas), una toma USB, una toma USB-C y cortinillas en las ventanas.
En España, el Nissan X-Trail casi siempre ha sido un modelo de alta aceptación, particularmente en 2016 y 2018, pero sobre todo en 2017, donde alcanzó una cifra de ventas de 88.000 unidades. El nuevo modelo, que se fabricará íntegramente en Japón y que ya se puede reservar en los concesionarios de la marca nipona, tiene un precio de partida de 42.160 euros y de inicio se podrá asociar a tres acabados: N-Connecta, Tekna y Tekna+. Sus máximos rivales serán modelos como el Toyota RAV4, el Honda CR-V, el Peugeot 5008 o el VW Tiguan.