¿Podemos quitarnos la mascarilla en el coche ahora que no es obligatoria en la calle?

Como ya sabemos, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció el pasado viernes el fin de la obligatoriedad del uso de la mascarilla en espacios exteriores. Así pues, a partir de este mismo sábado, siempre que se den las condiciones adecuadas, podremos dejar de utilizar este accesorio con el que hemos tenido que convivir durante algo más de un año. No obstante, si las condiciones no permiten mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros, el uso de la mascarilla seguirá siendo obligatorio.

Si tenemos en cuenta las medidas dictadas por la Ley 2/2021 del 29 de marzo publicada en el BOE, el uso de la mascarilla es obligatorio en «la vía pública, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público». Al tratarse de espacios cerrados, su uso en transporte públicos y vehículos privados también resulta de carácter obligatorio, aunque en este último caso hay algunas excepciones.
Al tratarse de un espacio cerrado, el uso de la mascarilla en el coche continuará siendo obligatorio
La actual normativa obliga a llevar mascarilla en el interior de un coche privado siempre que sus ocupantes no sean convivientes (a excepción de los menores de seis años). Así las cosas, estamos eximidos del uso de este elemento siempre que viajemos solos o todos los pasajeros convivan en una misma vivienda. Además, tampoco están obligadas a llevarla las personas que padezcan patologías respiratorias, así como en el caso de alteraciones de conducta o en personas con discapacidad o dependencia.

Teniendo esto en cuenta se debe recalcar que, por el momento, la mascarilla dejará de ser obligatoria únicamente en espacios abiertos. El coche es un espacio cerrado y, por tanto, aún habrá que esperar para poder actuar de igual modo. Recordemos que la sanción económica por viajar en coche sin mascarilla con una persona no conviviente puede ascender hasta los 100 euros. En el caso de las motos se permite viajar sin mascarilla si se viaja solo, con un acompañante conviviente o con un casco integral.