Preparación oficial para la Defender Challenge

Land Rover Defender by Bowler

Pablo J. Poza
Pablo J. Poza
Con su chasis de largueros y dos ejes rígidos, el Land Rover Defender no ha nacido para ganar carreras, pero, tras pasar por las manos de Bowler, este veterano todoterreno está dispuesto a sorprender a los más escépticos.


Apenas le quedan 22 meses de vida y, lejos de languidecer frente al cruel reloj, el Land Rover Defender se encuentra más joven que nunca y se convierte en el protagonista de una nueva copa mono-marca de rallies. La Defender Challenge by Bowler consta de siete citas a lo largo y ancho de Inglaterra, Escocia y Gales, que se disputarán entre marzo y noviembre de este año con 15 vehículos como el que ves en estas páginas.

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Impecable. El acabado de la preparación está por encima de lo habitual en vehículos de competición y dice mucho de la atención por el detalle que han puesto los responsables de Bowler Motorsport.landroverdefender05

Como punto de partida, se toma un Defender 90 SW de estricta serie, al que se le despoja de todos sus escasos lujos, incluidos los asientos traseros.

En materia de seguridad, se le añade una jaula interior integral, un sistema de extinción de incendios y dos asientos de competición con sus respectivos arneses de seis puntos.

Todo ello cuenta con la pertinente homologación de la FIA, al igual que el resto de la preparación, para permitir la participación del vehículo en otros rallies nacionales e internacionales.

Pero si la seguridad es importante, la parte dinámica no lo es menos, y en este sentido hay mucho trabajo por hacer en el Defender.

Los dos ejes rígidos siguen ahí, pero Bowler Motorsport ha desarrollado unos muelles y amortiguadores específicos en colaboración con Bilstein, pensados para que la robustez del conjunto sea una ventaja a la hora de atacar las zonas más rotas frente a los vehículos de rally derivados de turismos, que serán más rápidos en líneas generales, pero sufrirán más en estos escenarios; de ahí la elección de unos neumáticos Kumho de raids en una medida con un perfil no especialmente bajo (275/65-18), montados sobre llantas de aleación reforzadas Compomotive, y discos de freno perforados.

No se ha olvidado la preparación del motor, que eleva el par hasta los 450 Nm, mientras que la potencia alcanza los 175 CV, lo que supone un aumento del 43 %.

Cada unidad se vende aproximadamente por unos 73.670 euros, lista para competir. Los organizadores han previsto premios para los tres primeros clasificados en cada carrera y en el cómputo total de la Challenge, así como premios para el vehículo mejor preparado, el piloto con mejor evolución y el participante que demuestre mayor espíritu de equipo.

Habitáculo. Los pedales y las palancas del freno de mano, el cambio y la tránsfer no varían. El copiloto tiene a mano un odómetro, luz de lectura para el roadbook, un segundo pulsador del cláxon, el mando del sistema de extinción remoto…

Interior. Los asientos Motordrive conservan la mala ubicación de los originales, pegada a las puertas. El odómetro se ha instalado sobre un soporte fabricado específicamente para este Defender.

Atrás. Todos los guarnecidos han desaparecido. La rueda de repuesto se encuentra ahora en el interior, sujeta con cinchas, lo que mejora el reparto de masas y permite una rápida utilización.

LAS OTRAS «LOCURAS» DE BOWLER

landroverdefender08Nacida en 1985 como Bowler Offroad, Bowler Motorsport es una empresa radicada en Hazelwood (Derbyshire, Reino Unido) que se hizo famosa por desarrollar los Tomcat y Wildcat, exitosos vehículos de raids basados en el Defender. Su propuesta más reciente es el Nemesis, del que hay versiones de raids y de calle. Desde 2012, colabora activamente de forma oficial con Land Rover y es responsable del programa de participación de esta firma en el Dakar..

DEFENDER BY BOWLER

MOTOR

Diesel, 4 cilindros en línea, 2.179 cm3 (85×96 mm), compresión: 15,6:1. Pot.: 130 kW (175 CV) a 3.500 r.p.m. Par: 450 Nm a 2.000 r.p.m. Distribución variable, 4 válvulas. por cilindro; Inyección directa common rail, turbocompresor de geometría variable e intercooler. 

TRANSMISIÓN

Tracción: Tracción total permanente con bloqueo manual del diferencial central y reductora.

Cambio: Manual, de seis velocidades.

DIRECCIÓN

Tipo: Recirculación de bolas, asistencia eléctr.

Diámetro de giro: 11,3 m.

CHASIS

Tipo: Largueros y travesaños.

Suspensión (del./tras.): Eje rígido con brazos longitudinales y barra Panhard. / Eje rígido con triángulo central y tirantes longitudinales. En ambos ejes, amortiguadores y muelles específicos de Bowler.

FRENOS

Del./tras.: Discos vent./Discos.  ABS.

DIMENSIONES

Largo/ancho/alto: 3.922/1.790/2.018 mm Batalla: 2.360 mm. Vía del./tras.: 1.486/1.486 mm. Peso: 1.887 Depósito: 60 litros

RUEDAS

Llantas: Aleación, de 18 pulgadas. Neumáticos: Kumho 275/65-18.

PRESTACIONES, CONSUMO Y CO2

Velocidad máxima: 150 km/h; 0-100 km/h: 15,8 s. Consumo: 11,7/9,4/10,2 L/100 km. Auton.: 588 km. Emisiones de CO2: 269 g/km.

EQUIPAMIENTO

ABS, dirección asistida, neumáticos Kumho específicos, rueda de repuesto con anclajes rápidos, suspensión con muelles y amortiguadores desarrollados por Bowler en colaboración con Bilstein, jaula interior antivuelco de seis puntos de anclaje, cortacorrientes, sistema de extinción de incendios, luces de polvo, asientos baquet de competición con sus respectivos arneses de seis puntos, discos de freno perforados. Puesto de copiloto con luz para lectura de roadbook, segundo pulsador de claxon y terratrip,

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Land Rover Defender