Qué coche me compro: ¿Seat León TDI de 115 ó de 150 CV?

Nuestro lector R. G. L. nos ha hecho llegar la siguiente duda: “Voy a comprarme un Seat León seminuevo. Hago mucha carretera y suelo recorrer más de 30.000 km al año, normalmente con una o dos personas y poco equipaje. Practico una conducción relajada, principalmente por autopista. Tenía pensado adquirir un Seat León TDI 150 con un par de años, pero fui a ver uno a un concesionario y me han ofrecido una versión de 115 CV por mucho dinero menos. También tiene menos kilómetros y, mientras que el TDI 150 es automático y lleva acabado FR, el TDI 115 es manual y es un acabado Style. ¿Cuál me recomendáis?”

La duda que nos planteas es muy razonable. Y lo cierto es que, en tu caso, creemos que es más recomendable la variante de 115 CV, y te vamos a explicar por qué. En primer lugar, hay que tener en cuenta que ambos motores emplean el mismo bloque 2.0 TDI de cuatro cilindros en línea. Eso quiere decir que, si en un momento dado, adquieres el de 115 CV y notas que se te queda corto, siempre tendrías margen para reprogramarlo y ganar un ‘poco bastante’ de repuesta por poco dinero y sin afectar a la fiabilidad…
Independientemente de eso, creemos que tampoco te va a ser necesario. Si practicas una conducción tranquila, lo normal es que sueles conducir por debajo de las 3.000 revoluciones, y en ese rango la respuesta del 115 ya es muy buena. El TDI 115 entrega un par máximo de 300 Nm entre 1.500 y 2.500 rpm, y eso ya es una cifra más que suficiente como para moverse con soltura. El TDI 150 llega a 360 Nm, así que es claramente más rápido, pero es que no vas a necesitar más de los 300 Nm del TDI 115 para viajar con total normalidad.

Sí nos parece más crucial el hecho de que lo quieras con cambio manual o automático. La caja manual va francamente bien, y lo cierto es que en autopista, con esa buena respuesta a bajo régimen que citábamos, tampoco tendrás que utilizar demasiado. Por eso, salvo que quieras un coche automático sí o sí, seguiríamos dirigiendo nuestros pasos hacia el TDI 115.
Otra cosa ya es el nivel de acabado, algo que ya depende por completo de tu gustos y preferencias. Sí debes saber que el FR lleva una suspensión un poco más firme, pero la del Style ya logra un resultado muy equilibrado. De manera que, salvo que busques cierto toque deportivo, seguiríamos apostando por el TDI 115.