El alcohol está detrás de uno de cada cuatro accidentes mortales en carretera solo después de las distracciones al volante. Es más, en 2020, el 48,7% de los conductores fallecidos en nuestro país dio positivo en alcohol o drogas, según datos de la DGT. Cifras que indican que el ‘Si bebes no conduzcas’ todavía no ha calado lo suficiente en la sociedad. Así que para cortar por lo sano, ahora los coches tendrán que incorporar un alcoholímetro antiarranque, más conocido como Alcolock.

En concreto, la nueva Ley de Tráfico que entró en vigor este lunes 21 de marzo recoge que los vehículos destinados al transporte de personas y mercancías peligrosas, es decir, por el momento solo autobuses y camiones, estarán obligados a llevar y utilizar un alcoholímetro antiarranque a partir del 6 de julio, pero no afecta a vehículos de mercancías y particulares (turismos y furgonetas). Al menos no hasta 2024.
No obstante, a partir de dicha fecha del mes de julio, y por norma de la Unión Europea (recogido en el Reglamento 2019/2144 del Parlamento Europeo), todos los coches de nueva fabricación deberán integrar un sistema de conexión para su posterior instalación cuando se demande. Realmente su instalación dependerá de la legislación de cada país.
Y es que este sistema está incluido entre los diez ADAS (Sistema Avanzado de Asistencia a la Conducción, por sus siglas en inglés) que todo vehículo nuevo homologado en Europa deberá incluir obligatoriamente a partir de julio. Entre ellos está también el Asistente de Velocidad Inteligente (ISA), el Detector de Fatiga y Somnolencia, una Caja Negra (EDR) o la Alerta de Cinturón en las plazas traseras.

¿Cómo funciona? El alcoholímetro antiarranque se pone en funcionamiento tan pronto accedes al vehículo. Tendrás que soplar por la boquilla durante unos segundos (como en cualquier control de la Guardia Civil) y el dispositivo medirá tu nivel de alcohol en aire espirado. Si estás dentro de los parámetros permitidos, podrás arrancar y circular. Y solo deberás repetir el proceso si apagas el vehículo durante más de 30 minutos, si paras para recoger el equipaje de un pasajero, a repostar o a una simple comprobación, no tendrás que volver a soplar.
Si, por el contrario, el nivel es superior, el Alcolock bloqueará el motor de arranque y no te permitirá moverte. Debes tener en cuenta que en este caso, los datos serán registrados por la DGT y serás multado. En España no puedes superar el 0,15 mg/l de aire expirado si eres conductor profesional. ¡Y no se pueden falsear los datos! Los sensores de este dispositivo garantizan que no se pueda eludir el control gracias a tecnologías de reconocimiento de huellas dactilares, detección facial o pupila para identificar en todo momento al conductor del vehículo.
