Olvidarnos objetos dentro del coche puede parecer que no es una situación común, pero lo cierto es que ocurre con más frecuencia de lo que podemos pensar. Y aquí entra el club RACE para aclararlo: en 2022 recibió aproximadamente 8.000 llamadas de conductores que no podían abrir sus vehículos por haberse dejado las llaves dentro.
El caso es que, si tan sólo nos hemos dejado las llaves dentro del coche, únicamente deberemos esperar a la asistencia. Pero ¿qué ocurre si dentro del automóvil hay un bebé o un animal? Especialmente en verano, el tiempo corre en nuestra contra, con temperaturas en el interior que pueden alcanzar los 50 grados en muy poco tiempo.

La solución más rápida y drástica puede ser romper la ventanilla, pero lo cierto es que existe un truco para bajar la ventanilla y requiere de un objeto cotidiano. Aunque la primera solución es la más rápida, no está exenta de riesgo, ya que los fragmentos de cristal, aunque no cortan, pueden representar un peligro para el bebé o el animal. Valorar la situación es esencial para actuar de la mejor manera posible.
Un desatascador de tuberías es todo lo que necesitas para bajar la ventanilla
Gracias al vídeo de este policía de Estados Unidos, que se ha viralizado por su solución tan efectiva, sabemos que con unos desatascadores de tuberías podemos bajar la ventanilla. En el vídeo, se vale del efecto de vacío que genera la ventosa del desatascador para lograr su cometido. Usando cinta americana para que queden bien fijadas a la ventanilla, tira hacia abajo con firmeza, logrando dejar el espacio suficiente para poder meter la mano, quitar el seguro y, finalmente, abrir la puerta.
Poca gente, por no decir nadie, pensaría que este tipo de utensilios pueden servir para bajar una ventanilla. Además, al estar en casi todos los supermercados, se pueden adquirir con facilidad y rapidez ante una de estas emergencias.
Existen otras fórmulas para bajar la ventanilla en caso de que se nos hayan quedado las llaves dentro. Por ejemplo, introducir una lámina rígida en la ranura de la puerta para lograr abrir el hueco suficiente para poder pasar una cuerda con un nudo para fijar al pestillo. En el caso de los coches sin pestillo, el objetivo es el tirador de la propia puerta. Se trata de un método complicado, que requiere de mucha paciencia, pero está comprobado que se puede abrir una puerta.
