Automobile Barcelona 2023, ¿con qué me quedo?

Pese a todo, este Salón sigue siendo la referencia automovilística de la primera quincena de mayo. Eso sí, con una presencia europea cada vez menor dentro de la, en esta ocasión, treintena larga de marcas representadas. Al Automobile Barcelona se le están rasgando los ojos, y lo que está por venir…
Electrizante es el claim elegido por Automobile Barcelona para captar atención de los visitantes. No podía ser de otra manera. Cierto es que la electrificación todo lo puede hoy en día pero me gusta que el presidente del Salón, Enrique Lacalle, manifieste públicamente que “éste es un salón que no renuncia a ningún tipo de motorización”.
Y buena prueba de ello puede ser el stand de una de las marcas que más apuesta por esta muestra barcelonesa, Renault-Dacia, donde sus nuevas vedettes apostaban sobre todo por la hibridación convencional -Espace, Clio y Jogger, los ejemplos-. Cuánto nos hubiese gustado que Renault hubiese presentado aquí mundialmente el restyling del made in Spain Captur que será realidad próximamente -y que luciese en Barcelona junto al nuevo Mitsubishi ASX-, ya que todavía nos queda lejos esa nueva silueta Captur XL que será realidad de aquí a un año, y también fabricada en Valladolid.
Otra de las grandes noticias del salón, sin ser 100% eléctrica, ha sido la decisión de Seat de alargar la vida comercial de Ibiza y Arona hasta al menos finales de la década para seguir ofreciendo soluciones de transición a toda esa sociedad que por presupuesto, necesidades o posibilidades de carga, no puede acceder a un eléctrico puro.
Y ya de paso, bola extra para la planta de Martorell que tenía sus dudas de capacidad/empleo si solo dependía de los eléctricos pequeños de Volkswagen y Cupra -de nombre Raval, ahora oficialmente, aunque todos ya lo conociésemos- y de un León reestilizado el año próximo. Así que sí, habrá restyling para los utilitarios y superventas de Seat.
Tavascan, gran protagonista del Automobile Barcelona

Ya entrando en modelos puros para destacar, Tavascan ha sido el gran protagonista. A nivel diseño, el coche del Automobile, sin duda. Espectacular, lo mires como lo mires. Un coche que se gestó en época de Alejandro Mesonero-Romanos y que ha terminado puliendo Jorge Díez sin duda merecerá los premios más importantes de Diseño del año próximo. Y si no, al tiempo. Alguien de esa casa me dice que si con ese coche se hubiese seguido una estrategia mecánica similar a la del Formentor, habrían hecho saltar la banca. Pero no, 100% eléctrico.
Sigo con modelos destacados, y en este caso llego a uno con un diseño también potente, que a mí me gusta más que la generación anterior y que, encima será aún más superventas. El Hyundai Kona lo tiene todo para triunfar a nivel de soluciones tecnológicas y de diseño, y encima crece dejando respirar a una carrocería Bayon que no terminaba de encontrar su sitio en la gama. Este Kona es el gran lanzamiento del año de Hyundai.
También muy interesante contemplar la recién presentada Clase E de Mercedes sin electrificación 100% -para eso están ya los EQ- y con cualidades viajeras y de confort que lo hacen merecedor al título honorífico del Airbus de la carretera.
O Mazda corrigiendo el tiro de su MX-30 y la justa autonomía que no ha calado en el mercado y que ahora ofrece una configuración original híbrida enchufable con batería para 80 km y un motor rotativo actuando de generador eléctrico para aumentar la autonomía en otros 600 km extra. Y me parece de justicia no olvidar, y sigo con Mazda, su CX-60 Diesel que contra la lógica de lo que se nos quiere imponer, acapara ya el 70 por ciento de las ventas del modelo.
Termino este capítulo de modelos con otro coche que por su carácter simpático, por su originalidad estética retro y por sus posibilidades urbanas eléctricas, acapara atenciones: el Microlino, que aspira a bastante más polivalencia de uso de lo que podría ofrecer, por ejemplo, un Citroën Ami. Eso sí, hablamos de eléctricos y el precio final lo nota. Quizás mediante fórmulas de suscripción pueda tener más aceptación comercial.
BYD y sus cinco coches eléctricos

Hablaba en la entradilla de ese toque asiático del Automobile Barcelona y el gran protagonista ha sido BYD con su gama de cinco eléctricos, bien realizados en calidad, bien presentados en diseño y con el control de la cadena de valor eléctrica que solo los chinos tienen en este momento. Los conocí en parte en el pasado Salón de París -algún detalle de diseño interior me pareció excesivamente intrépido- y ahora tenía interés en ese Dolphin que buscará popularizar esta marca y tecnología sin cruzar el umbral de los 30.000 euros para un compacto con mucha carga tecnológica y afinamiento técnico frente al modelo original que se comercializa en China.
Y siguiendo con la oferta eléctrica de este país no podemos olvidar a Aiways y su diseño dinámico, algo que también vemos en Seres presentes y en los que están por venir, que serán la bomba.
Tesla también está con un stand notable en Barcelona y sus modelos referentes eléctricos del mercado, aunque habrá que ver si las fluctuaciones de precios de la marca de Elon Musk juegan esta vez a favor del cliente.
También importantes, por oferta de producto y metros cuadrados ocupados, Kia con su EV6 GT como última gran novedad de efecto wow a nivel prestacional aunque con Niro y Sportage como modelos de volumen, o Suzuki con su siempre amplia y atractiva gama de soluciones electrificadas polivalentes para el gran público, o Nissan luciendo e-power y Ariya a la espera de la revolución para el año próximo en formato eléctrico 100% para Micra y el sustituto del Leaf.
Termino refiriéndome a algo que me ha tocado la fibra sensible, para bien: el proyecto que busca resucitar Ebro y que aspira a fabricar ya unidades a finales del año próximo -en la misma planta de Nissan donde también se fabricaron hace más de cinco décadas – y prevé llegar a 50.000 unidades en 2027 con una gama que incluirá una pick-up y una furgoneta.