Qué revisar antes de comprar un vehículo de segunda mano

¿Estás pensando en comprar un coche de segunda mano? Para evitar posibles averías, deberías revisar los puntos que te proponemos a continuación.


Cuando nuestro vehículo tiene unos años y nos comienza a dar problemas, nos vemos en la necesidad de ir pensando en cambiarlo, pero la economía personal o las circunstancias personales, no nos permiten comprar un vehículo nuevo por el desembolso económico que supone.

En ese momento, comenzamos a mirar vehículos de segunda mano de diferentes marcas y modelos, en concesionarios o particulares y nos surgen muchísimas dudas respecto a qué mirar o qué ver para hacer una compra segura y no arrepentirnos después de haberlo comprado.

Cuando nos dispongamos a ver y probar un vehículo de segunda mano para su compra, debemos tener en cuenta lo siguiente:

  • Estado del líquido refrigerante en vehículos diésel y gasolina: debemos mirar el estado de líquido refrigerante, observando si al quitar el tapón del vaso de expansión (siempre con vehículo con motor frío) existen restos de aceite. Si esto ocurre puede ser que el vehículo haya tenido un problema de junta de culata, habiéndose mezclado el aceite de motor con el refrigerante, ensuciando todo el circuito y siendo muy difícil de limpiar por completo. O puede que el vehículo siga con esa avería, con lo que la compra sería un error.
  • También al abrir el vaso de expansión podemos encontrar como barro en la botella y puede ser debido a que el propietario le haya echado tapafugas al circuito de refrigeración por problemas de pérdidas de líquido, siendo un remedio que ocasiona que el circuito se tapice y la refrigeración sea menor.
  • El motor sopla por la varilla del aceite en vehículos diésel y gasolina: con el motor en marcha localizamos la varilla de nivel de aceite y muy despacio vamos sacándola. Si al sacarla por completo salen muchos vapores y estos vapores arrastran aceite, es un problema de motor, con lo cual la compra es poco recomendable.
  • Desgaste de discos de frenos en vehículos diésel y gasolina: tenemos que mirar los discos de freno delanteros y si lleva en la parte trasera también. El desgaste de los discos de freno es un indicador muy importante, porque si el vehículo marca por ejemplo 80.000 kilómetros y los discos están con mucho desgaste y escalón, nos harán dudar si realmente los kilómetros son reales.
  • Embrague con desgaste o ruido en vehículos diésel y gasolina y con caja de cambio manual: para comprobar si el embrague tiene desgaste, la prueba que debemos realizar es arrancar el motor, freno de mano echado, pisar el embrague (desembragar) meter la 4ª velocidad y comenzar a embragar (soltar el pedal de embrague) poco a poco. Si cuando llevamos más de la mitad del recorrido de embragado el motor no tiende a calarse y conseguimos soltar el pedal del embrague por completo, el embrague patina.
  • Si con el motor en marcha y la palanca de velocidades en punto muerto se escucha un ruido que desaparece al pisar el pedal del embrague, el vehículo puede tener problema de collarín o cojinete de empuje y ser una avería cara.
  • Vibraciones del motor y palanca de velocidades en vehículo diésel y gasolina, manual o automático: si el motor tiene mucho cabeceo, y la palanca de velocidades vibra mucho, el vehículo puede tener varios problemas. Por un lado, podemos tener un problema de inyección, pudiendo tener un problema en el sistema de inyección (inyectores en mal estado) o un problema de volante bimasa. En este caso, sería conveniente pedir un diagnostico en taller y así ver de donde viene la avería antes de comprarlo.
  • Pilotos traseros oscurecidos por humo en vehículos diésel: es otro indicador que nos puede decir que ese vehículo echa más humo de la cuenta por el tubo de escape por un número excesivo de kilómetros, por un problema en el sistema de inyección etc., y se introduce en los pilotos traseros oscureciéndolos.
  • Desgaste de los neumáticos: hay que fijarse en los neumáticos y ver si el degaste que tienen (si tiene) es uniforme o gasta más de la parte de fuera o de dentro. Esto puede ser debido a que las cotas de dirección están fuera de rango, que se solucionará con una simple regulación del paralelo o que el vehículo ha sufrido un golpe y no ha sido reparado correctamente.
  • Testigos encendidos en el cuadro de instrumentos: si vemos algún testigo encendido en el cuadro de instrumentos como puede ser el Airbag, SRS, testigo de motor, etc. son indicadores que hay un problema que debe ser diagnosticado y reparado antes de comprar el vehículo.
  • Dimensiones de los neumáticos y código de velocidad: si las características de los neumáticos no corresponden con los que el fabricante dice en la ficha técnica, al comprar el vehículo y tener que pasar la ITV vamos a tener un problema al dar desfavorable ésta, debiendo cambiarlos por los que debe llevar.

Siguiendo estos consejos pueden hacer que la compra de un vehículo entre particulares, e incluso en un taller, pueda resultar más segura y no arrepentirnos una vez comprado el vehículo.