Entre los contendientes experimentados, Toyota ha construido varias unidades de su Hilux con arreglo a la reglamentación T1+, que permite ruedas de mayor tamaño y mayores recorridos de suspensión. Habrá cuatro Hilux desarrollados en Sudáfrica para Nasser Al-Atiyah & Mathieu Baumel, Giniel de Villiers & Dennis Murphy, Henk Lattegan & Brett Cummings y Shameer Variawa & Danie Stassen.
Las dos primeras parejas deberían estar en la parte alta de la tabla a diario y al final de carrera, sobre la liderada por el piloto catarí, uno de los que más en forma se encuentran de la caravana; no en vano ha estado corriendo casi cada semana no solo en todoterreno, sino también en rallys. Por su parte, las dos parejas sudafricanas son toda una incógnita y deben demostrar por qué están en el equipo oficial en vez de otros pilotos fieles a la marca. El coche se ha rodado en el certamen sudafricano y en alguna carrera internacional, y ha demostrado estar entre los mejores, pero también ha sufrido algunas preocupantes averías, sobre todo en las transmisiones.
Dentro de la manada de Hilux presentes, de entre las gestionadas por Overdrive hay algunas que presentan las mejoras permitidas por el reglamento T1+, aunque otras se mantienen con la configuración clásica, que puede ser un gran aliado en carrera por la fiabilidad. Lucio Álvarez, con Armand Monleón en el asiento de la derecha, tiene sus opciones en una estructura que cuenta con Yazeed Al-Rajhi, Van Loon, Chabot, Barbosa y los Yacopini como principales valedores.
Sin una unidad tan moderna, Isidre Esteve & Txema Villalobos sacarán partido de lo bien que leen las careras, de la experiencia acumulada en la pasada edición del Dakar, que disputaron con el mismo vehículo, y estarán al acecho para cuajar una buena actuación.