El Mercedes-Benz GLC SUV de 4,65 metros es rival directo del Audi Q5, el BMW X3 o el Volvo XC60. Se ofrece con cuatro motores de gasolina de 211, 367, 476 y 510 CV, además de tres diésel de 170, 204 y 258 CV, y un híbrido enchufable -350e- de 320 CV. Todos tienen tracción total y cada propulsor sólo se vende con un nivel de acabado al que se le pueden poner diferentes packs de personalización.
Este SUV destaca porque su calidad de acabados está fuera de toda duda, así como el comportamiento de su excelente chasis. Los motores ofrecen muy buena respuesta, y los diésel son especialmente buenos al hablar de consumo.
Tiene un buen maletero de 550 litros y unas amplias plazas traseras, si bien están más pensadas para que dos adultos vayan con total comodidad. Por lo demás, está a punto de recibir un restyling que modificará los motores. Tiene un precio considerable y ofrece un listado de equipamiento opcional tan extenso como caro, algo que puede aumentar la factura considerablemente.
Versiones | 250 4MATIC | 250 D 4MATIC | 350 e 4MATIC |
Mecánica | Gasolina | Diésel | Híbrido enchufable |
Precio desde | 49.425 euros | 50.600 euros | 56.450 euros |
Distintivo DGT | C | C | ECO |
Consumo medio homologado | 6,5 L/100 km | 5,0 L/100 km | 2,5 L/100 km |
Consumo medio real | 10,1 L/100 km | 7,8 L/100 km | 7,0 L/100 km |
Coste euros/100 km | 13,33 €/100 km | 9,75 €/100 km | 9,24 €/100 km |
A la espera de la llegada de los nuevos motores del restyling, el híbrido enchufable será la opción más recomendable siempre y cuando hagas recorridos de no más de 30 km y puedas recargarlo entre ellos. De lo contrario, el diésel es la opción más razonable, pues se amortiza en sólo 32.821 km.
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