Toyotoa Land Cruiser HDJ 80 «Sierra Overland»

El coche que ves en las fotos fue matriculado nuevo en Alemania en 1993 y llegó a nuestro país 11 años después. Se trata de un modelo europeo de las primeras series, con acabado VX (el más completo), fabricado por Araco –hoy Autobody, una empresa filial de Toyota Motor–, en Yoshiwara (Japón), la misma planta donde hoy en día se fabrican los Land Cruiser 70 y 200.
Veinte años después y en muy buen estado de conservación, el coche pasó a manos de su actual propietario, un fanático de la conducción todoterreno en general y de los Land Cruiser en particular, quien, de hecho, conduce habitualmente un KDJ 120 con nada menos que 350.000 km.
Desde el primer momento, su nuevo propietario tenía muy claro que el coche se dedicaría al todoterreno turístico intensivo, con excursiones por la península y el norte de África. Con el listado de modificaciones en la mano, el coche fue llevado a las instalaciones de Sierra Overland, en Collado-Villalba (Madrid), grandes especialistas en este modelo, que se han ocupado de toda la parte mecánica. Los detalles de confort y abundantísimo equipamiento interior y navegación han corrido a cargo de su propietario
Suspensión regulable
La suspensión recibió las primeras atenciones y, como se pensaba viajar con toda la familia e instalar un cabrestante delantero, se eligieron los muelles más duros disponibles, con varilla de 17 milímetros de diámetro delante (que tiene una rigidez de 40,59 N/mm) y 20 mm detrás (57,61 N/mm). Los amortiguadores están especialmente ajustados para los muelles y, como el coche no va a ir «de carreras», se desecharon expresamente los de botella separada, siempre más pesados, caros y delicados para instalar, decidiéndose por unos CBXG con regulación manual de dureza a extensión en 12 posiciones. Con todo ello, la elevación (40 mm) es razonable y más que suficiente.
En el afinado final de geometrías de suspensión, solo ha sido necesario recolocar los anclajes de la barra Panhard trasera y adecuar los tirantes de las barras estabilizadoras a la nueva altura. La elevación de la carrocería libera espacio para instalar los nuevos neumáticos AT de mayor diámetro, montados en las bonitas llantas de aleación originales del coche, muy adecuados para una utilización polivalente en un vehículo de este tamaño. Los nuevos neumáticos también elevan la «panza» del Station Wagon unos importantes 25 mm, y solo alargan el desarrollo final un 5%, que el poderoso propulsor original hexacilíndrico absorbe sin inmutarse. En este punto, recordamos que el motor del coche solo ha recibido una cuidadosa puesta a punto y un repaso de inyectores y de bomba (nuevo vástago), que ha mejorado notablemente la respuesta y suavidad motriz. En el futuro, no se descarta la instalación de un intercooler, que este motor (1-HD-T) agradece sobremanera. Con este refrigerador de aire de admisión y unos retoques en el turbo y en la bomba de inyección, no es difícil conseguir cerca de 200 CV con plena fiabilidad. Recordad que la última evolución de este propulsor (1-HD-FTE) instalada en el Land Cruiser HDJ100 disponía ya de intercooler en origen y rendía 204 CV.
De cara a mejorar el confort del conductor en largos viajes por autopista, se ha sustituido el volante por otro forrado de cuero y más pequeño. Además, se ha instalado el control de velocidad de crucero, un equipo específico para este vehículo que no dispone de la temida electrónica de gestión de motor.
Para asegurar el auto-rescate, se ha montado un cabrestante de 4.080 kilos, y los bajos de la carrocería se han protegido con planchas de acertado diseño y fabricación exclusiva del preparador para este modelo.
Durante los trabajos, aparecieron dificultades, ya que algunos tornillos se resistían a abandonar su confortable alojamiento tras veinte años de servicio, por lo que fue necesario trabajar con sumo cuidado. El coche resulta muy agradecido con las mejoras, y un punto especialmente engorroso ha resultado el montaje de los faros antiniebla, que finalmente quedaron bien integrados en el parachoques original. El sistema eléctrico también ha sido renovado en gran parte, especialmente los mazos de accionamiento de las ventanillas eléctricas. Como detalle final y con muy buen criterio, se desmontó el pesado (40 kg.) «mataburros» delantero que llevaba instalado el coche y se anotó la modificación en su ficha técnica.
Su creador
Motor | |
Bomba inyectora reparada y modificada | 900€ |
Toberas de inyector nuevas, revisión y ajuste | 435 € |
Regulador de presión del turbo, soplando a 1,0 bares máximo | 72 € |
Reparación del acoplamiento viscoso del ventilador | 36 € |
Control de velocidad de Crucero Waeco MS-400 | 350€ |
Snorkel Safari | 450€ |
Suspensión | |
Refuerzos en el eje delantero Sierra Overland | 24 € |
4 muelles delanteros y traseros reforzados King Springs | 700€ |
4 amortiguadores regulables Boss | 750€ |
Casquillos de corrección de avance Old Man Emu | 150€ |
Transmisión | |
Renovación del fluido de la caja automática y sustitución del filtro | 150€ |
Dirección | |
Amortiguador de dirección Old Man Emu | 140€ |
Refuerzo de chasis en la zona de la caja de dirección Sierra Overland | 80€ |
Frenos | |
Latiguillos metálicos Goodridge de sobremedida | 193 € |
Discos de freno rayados y perforados Sierra Overland | 248 € |
Pastillas de freno alto rendimiento EBC | 80€ |
Navegación/ Electrónica | |
GPS TwoNav Delta | 600€ |
Faros auxiliares de largo alcance Hella Comet FF300 | 160€ |
Faros antiniebla Hella 90 mm | 150€ |
Tercera luz de freno | 150€ |
Manos libres Bluetooth Parrot | 130€ |
Emisora CB-27 TCB 880H MAX TTI | 130€ |
Emisora 2 metros Kenwood TM-D710€ | 500€ |
Antena CB-27 Super Santiago 1200 | 40€ |
Antena 2 metros CR-627 D-Original | 50€ |
Alarma Cobra | 280€ |
Sistema de monitorización de presión y temperatura de neumáticos Hella TMPS 400 | 340€ |
Apoyacabezas con DVD Sony | 350€ |
Interior | |
Volante deportivo 350 mm | 150€ |
Carrocería | |
Taloneras laterales de tubo redondo Sierra Overland | 300€ |
Rescate | |
Cabrestante Ramsey REP-9000 de 4.070 kg con cable sintético | 1.800€ |
Protecciones | |
Protector frontal Sierra Overland de aluminio de 8 mm | 205 € |
Protector de caja y tránsfer Sierra Overland de aluminio de 8 mm | 356 € |
Protectores de amortiguador Sierra Overland de aluminio de 6 mm | 147 € |
Neumáticos y llantas | |
Neumáticos BFGoodrich All-Terrain 285/75-16 | 770€ |
Separadores 30 mm AVM | 250€ |
Varios | |
Gastos de homologación e ITV | 850€ |
FICHA TÉCNICA | |
MOTOR | |
Tipo | 1HD-T. Seis cilindros en línea, longitudinal. Refrigeración líquida |
Distribución | Árbol de levas en culata. OHC. 12 válvulas |
Ciclo | Diésel. Cuatro tiempos |
Alimentación | Inyección directa con bomba rotativa mecánica. Turbocompresor |
Diámetro x carrera | 94 x 100 mm |
Relación de compresión | 18,6:1 |
Desplazamiento | 4.164 cm3 |
Potencia máxima | 167 CV a 3.600 r.p.m. |
Par máximo | 36,7 Kgm a 1.800 rp.m. |
TRANSMISIÓN | |
Relaciones | 1ª: 2,95. 2ª: 1,53. 3ª: 1,00. 4ª: 0,765. M.A.: 2,678 |
Caja de cambios | A442F. Automática, de cuatro velocidades hacia delante y marcha atrás |
Caja tránsfer | HF2A. 2 velocidades. Largas: 1,000. Cortas: 2,488 |
Tipo de tracción | Total permanente. Diferenciales delantero, central y trasero: con bloqueo manual al 100 % |
Reducción en los diferenciales | 4,100 |
CARROCERÍA | |
Dirección | Asistida. Recirculación de bolas. Asistencia regresiva en función de la velocidad |
Frenos | Discos ventilados delante (Ø311 mm) y detrás (Ø335 mm) |
Ayudas | Asistencia por bomba de vacío |
Chasis | Independiente, 2 largueros de acero y 9 travesaños en escalera |
Carrocería | Chapa de acero atornillada al chasis mediante 10 casquillos de goma |
Suspensión delantera | Eje rígido, 2 brazos longitudinales y barra Panhard transversal, muelles helicoidales y amortiguadores de gas regulables. Barra estabilizadora (Ø29 mm) |
Suspensión trasera | Eje rígido, 4 brazos longitudinales y barra Panhard transversal. Muelles helicoidales y amortiguadores de gas regulables. Barra estabilizadora (Ø25 mm) |
Neumáticos | 285/75-16 119 R (serie: 275/70-16 114 H) |
Llantas | 8 x 16, de aleación, con separadores de aluminio de 30 mm de espesor y doble fijación (serie: sin separadores) |
DIMENSIONES | |
Longitud | 4.820 mm |
Anchura | 1.930 mm |
Altura | 1.990 mm (serie: 1.890 mm) |
Vías delantera/trasera | 1.670/ 1.675 mm (serie 1.610/ 1.615 mm) |
Batalla | 2.850 mm |
Tara | 2.420 kg (serie 2.260 kg) |
Capacidad combustible | 95 litros |
TT de lujo
El Land Cruiser 80 representa la tercera generación de los Station Wagon de Toyota, todoterrenos «tope de gama» diseñados como automóviles de lujo para una utilización mixta carretera-todoterreno. Por ello, no sorprende que el manejo de este TT resulte extremadamente suave y muy agradable, bien ayudado por el cambio automático y con un habitáculo muy bien insonorizado.
Estas cualidades no se han perdido con la preparación y, rodando por asfalto, el silencio interior es importante. Su punto fuerte es la seguridad y el aplomo que transmite, incluso en recorridos de montaña. Con los separadores de rueda, se ha aumentado 60 mm el ancho de vías para compensar la elevación del centro de gravedad tras el montaje de la nueva suspensión y los neumáticos.
Nos ha sorprendido el buen tacto de los frenos, que con unos latiguillos metálicos y nuevos discos ranurados mordidos por pastillas de alto rendimiento mejoran notablemente el mordiente de la frenada. Este detalle resulta determinante en un coche de casi 3.000 kilos en orden de marcha y que nunca ha ido sobrado con los frenos originales.
Entrando en pista, se mantienen las buenas impresiones, y este Land Cruiser se siente estable y preciso. Subiendo el ritmo, la dirección aligera su tacto y los movimientos longitudinales son un poco aparatosos al pasar zonas rizadas o con badenes. La causa era que el día de nuestra prueba se había seleccionado un reglaje suave de los amortiguadores para «salir a pasear con los niños». En los caminos más retorcidos, hay que trabajar «de lo lindo»; su enorme tamaño no ayuda, y hay que jugar con el acelerador para colocar el coche y encarar la salida de la curva.
Cuando llegan las trialeras, la sensación de seguridad y poderío se mantiene, y prácticamente no es necesario tomar inercia, porque siempre hay respuesta motriz para superar el obstáculo. El cambio automático facilita mucho la tarea del conductor, y resulta sorprendente cómo sin bloqueos y a veces en largas, el coche afronta importantes obstáculos sin aparente esfuerzo y también permite ciertas licencias en las inclinaciones laterales. En las subidas más pronunciadas, es un gusto ver a este enorme Land Cruiser subir «al tran tran» «sin despeinarse», y en las bajadas, la retención del motor en cortas es increíble, y apenas hay que utilizar el freno. Solo su tamaño puede resultar un impedimento en caminos o pasos estrechos.
El consejo TT
Si tienes la oportunidad de contar con un Land Cruiser HDJ 80 como punto de partida, ya tienes la mayoría del camino andado. No hay otro TT que combine potencia, confort, habitabilidad, robustez y motricidad como este. Dicho lo cual, centrar la preparación en ganar altura, tracción y capacidad de frenada es inteligente. Solo nos han faltado el intercooler y unos muelles neumáticos adicionales.
Vehículo base | 5 Estrellas |
Coste de la preparación | 3 Estrellas |
Calidad de realización | 4 Estrellas |
Versatilidad | 4 Estrellas |
Resultado final | 4 Estrellas |