Cómo utilizar bien las luces del coche y evitar multas

Las luces del coche son fundamentales y es uno de los elementos que debemos cuidar tanto a la hora de realizar su mantenimiento como en el momento de utilizarlas. Te contamos cómo actúa un buen conductor con el sistema de iluminación de su vehículo.
1.- Intermitentes

Eres mal conductor si… no usas los intermitentes cuando debes (no señalizar una maniobra con ellos supone una sanción de 200 euros), un mal muy común entre los conductores españoles. Y mira que requiere poco esfuerzo, y que las bombillas de los intermitentes suelen ser eternas, y que su consumo es casi nulo… pero no hay forma. Seguro que, en cada trayecto que realizas, das con más un mal conductor que, al menos en algún momento, no los utiliza.
Cómo hacerte buen conductor: El intermitente se debe utilizar cada vez que vayamos a realizar un giro, al salir de una glorieta, realizar un cambio de carril e, incluso, para facilitar el adelantamiento de un coche que venga detrás en una carretera secundaria o avisarle de que no adelante si viene otro coche de frente que él no ha visto.
2.- Alumbrado

Eres mal conductor si… ¿Eres de esos conductores que no sabe que hay que utilizar la luz de corto alcance obligatoriamente desde el momento en que empieza a oscurecer y hasta bien entrado ya el día? Pues recuerda que está sancionado con 200 euros.
Antes, muchos conductores pensaban que bastaba con poner la luz de posición; error. Ahora, muchos creen que basta con la luz de día, pues ellos creen que ven y ya es suficiente… No son conscientes de: 1) La luz de día no alumbra; sólo ves por su resplandor. 2) La luz de día es delantera, así que el que viene por detrás no te ve. 3) La luz de día está pensada para que te vean de día. De ahí su nombre. Pues bien, precisamente por ese motivo, van orientadas más altas que una luz de corto alcance. Y, por eso mismo, de noche deslumbran tanto a los demás usuarios de la vía que te vean venir de frente.
Cómo hacerte buen conductor: Una buena opción es llevar las luces en automático, si nuestro coche lo ofrece. Si no, basta con poner la luz de corto alcance en cuanto empieza a escasear la luz, ya sea porque va a oscurecer, porque está amaneciendo, porque llueve o porque hay algo de neblina.

3.- Faros antiniebla
Eres mal conductor si… Aquí nos encontramos con dos perfiles. Primero está el que no conecta los antiniebla aunque no se vea al coche que va delante hasta que está casi encima de él, y luego está el que enciende todas las luces del coche en cuanto ve la más mínima neblina, convirtiendo su coche en una auténtica feria. No pone más luces porque no las tiene, sin ser consciente de que, cuando no es necesario, las luces antiniebla producen molestos deslumbramientos, y ya no digamos si es de noche.
Recuerda que el uso de estos faros es obligatorio con nieve, lluvia densa o humo o polvo espeso en el ambiente: si no los accionas te expones a una sanción de 200 euros.
Cómo hacerte buen conductor: Muy fácil. ¿Sabes lo que son 100 metros? ¿Eres capaz de ver a un coche que vaya a esa distancia sin que lleve los antiniebla? Pues si lo ves con suficiente claridad, no hacen falta que pongas los faros antiniebla, pues sólo conseguirás deslumbrar y que otros conductores maldigan a tu familia hasta que te pierdan de vista. Si no ves al coche a esos 100 metros con claridad, pon los antiniebla.