Sin embargo, hay un artrópodo invertebrado de apenas 10 cm de largo capaz de aterrorizar a todos los anteriores seres… al menos en el mundo natural. Se trata del escorpión que, precisamente, aparece en el logo corporativo empleado por Abarth, la firma deportiva del Grupo Fiat, creada en 1949 por Carlo Abarth… y que dejó de funcionar a finales de los 80 para ‘resucitar’ hace poco más de tres años de la mano de dos modelos: el Abarth Punto y el Abarth 500.
El primero de ellos ha recibido en septiembre de 2010 un importante ‘lavado de cara’ para actualizar su imagen exterior e interior, así como su mecánica y hasta su nombre -ahora: Abarth Punto Evo-… y el resultado ha sido un auténtico y genuíno mini-GTI que cumple a rajatabla una de las máximas que el creador de Abarth puso como condición para todos sus modelos: deportividad al alcance de todos. Y es que lo primero que te sorprende de este coche es su competitivo precio: 18.690e, que le permite ser el más asequible de su segmento -con permiso del Skoda Fabia RS que, gracias a su descuento actual de 2.020 €, se queda en 18.250 €y estar muy lejos del VW Polo GTI -que sale por 22.270 € con su rebaja de 1.230 €.
Qué debes saber de…
|
Llama la atención: es un ‘GTI’
Estéticamente, el Punto no ‘se oculta nada’, es un deportivo… y quiere que todo el mundo lo vea: paragolpes frontal con grandes tomas de aire, unas vistosas llantas de 17″, un voluminoso alerón sobre la luneta trasera, una bonita doble salida de escape cromada… Por lo demás, y gracias al mencionado restyling -que ha afectado al frontal y a la parte trasera-, este Abarth, que sólo está disponible con carrocería de tres puertas, mantiene un aspecto actual, moderno y atractivo.
Un Punto… con detalles rácing
El habitáculo del Abarth tiene una apariencia tan rácing como el exterior; lo más llamativo son los excelentes asientos deportivos con reposacabezas integrados, que lo tienen todo: son bonitos y aparentes, bastante cómodos para ser tan deportivos y capaces de proporcionar una muy correcta postura de conducción… aunque un poco elevada -al menos eso ayuda a que la visibilidad sea buena-.
Del puesto de mandos hay varias cosas mejorables, por ejemplo, la instrumentación tiene una imagen un poquito antigua y va recubierta de un plástico que produce reflejos; las palancas que hay tras el volante quedan algo alejadas de los dedos y los mandos del climatizador bizona están ubicados en una posición demasiado baja en la consola central. Con todo, el Abarth cumple en calidad -sus ajustes son correctos, aunque abusa un poquito de los plásticos duros-, también en diseño -el interior fue lo que más se modificó con el restyling… y lo cierto es que les ha quedado muy bien- y en habitabilidad -es de los mejores urbanos-.
Otro apartado que cambió con la nueva gama fue el motor: sigue manteniéndose el anterior 1.4 turboalimentado… pero, ahora, cuenta con la tecnología MultiAir; este sistema permite prescindir de la mariposa de la admisión -es la encargada de ‘abrir’ el paso del aire que llega al motor- sustituyéndola por un dispositivo electrohidráulico más eficaz y preciso. Según la marca, con él se gana en potencia y se reduce el consumo; de hecho, Abarth declara que el Punto Evo ahora desarrolla 10 CV más -se pasa de 155 a 165 CV– y consume, de media, un litro menos -que, en porcentaje, es casi un 15%-. ¿Y en la práctica? Creo que la mejor forma de averiguarlo será… girando la llave del contacto y poniendo el motor en marcha.
El Punto Evo Por Dentro
Estos pedales de aluminio son de serie; no resbalan aunque tengas los zapatos mojados.
El botón Sport modifica la respuesta del acelerador, la dirección… A su derecha, se encuentra el USB para la radio.
De serie, el Abarth cuenta con aire acondicionado pero, por 200 –, puedes incluir este climatizador bizona
El maletero ofrece unos correctos 275 l.Este equipo de audio Hifi vale 400 €.
Los asientos son excelentes; por 1.700 €, hay unos baquets Sabelt.
Qué lleva de serie
ABS, ESP, seis airbags, dirección asistida, aire acondicionado, elevalunas eléctricos, cierre centralizado, llantas de aleación de 17″, equipo de audio con CD, Mp3 y USB, Stop&Start, botón Sport, kit estético -paragolpes, faldones y alerón-, asientos deportivos, frenos Brembo, ordenador de a bordo… OPCIONES: Control de velocidad (100 -), sensor de presión de neumáticos (300–), preinstalación de navegador (70–), climatizador bizona (200–), equipo de audio Hifi (400-), retrovisor antideslumbramiento (150-)…
¡Ponlo siempre en Sport!
Cuando el propulsor del Evo se pone en funcionamiento, el escape genera un agradable sonido de coche serio: es intenso, ‘retumba’… Un consejo: antes de iniciar la marcha es recomendable familiarizarse con una palanquita que hay justo por delante del cambio; se llama DNA, y permite elegir entre dos posiciones, Normal y Sport. En la segunda de ellas, la respuesta del acelerador se vuelve más rápida, la dirección se endurece y conecta el TTC, una función del control de estabilidad que mejora la capacidad de tracción del Punto Evo.
En la práctica, cuando una de las ruedas delanteras patina, el TTC es capaz de frenarla, consiguiendo que ese exceso de fuerza llegue a la otra rueda. Lo cierto es que, después de probarlo, casi siempre elegirás la posición Sport, ya que la Normal el Abarth pierde gran parte de su deportividad, convirtiéndose en un simple urbano con una dirección muy asistida y una respuesta al acelerador lenta… Sin embargo, en el Sport todo cambia, y mucho. Para empezar, el motor responde con inmediatez a cualquier pequeña insinuación que realices sobre el pedal del acelerador, y no tardas en disfrutar de una respuesta muy contundente desde poco más de 1.700 rpm. No se aprecia retraso alguno en la respuesta del turbo y, cuando aceleras a fondo, percibes cómo el motor empuja con bastante rabia y mucha progresividad hasta un poco más allá de las 5.500 rpm, momento en el que el 1.4 Turbo agradecerá que cambies a una marcha superior para seguir entregando lo mejor de sí.
El Punto Evo por fuera
Pulsa el escorpión
El logo de Abarth sirve de pulsador para abrir el portón del maletero.
Tintadas
Por 120 euros, puedes oscurecer las lunas laterales traseras y la del portón del maletero.
Muy abajo
El difusor trasero, que tiene una función meramente estética, incluye la luz de marcha atrás y el piloto trasero antiniebla.
De serie… Lleva estas llantas de 17″. Por 200e, hay unas con otro diseño que pueden montar cadenas para la nieve -en éstas, por diseño, no es posible-.
¡Ponle pegatinas!
Por 200-, puedes incluir estas pegatinas de Abarth, que alcanzan también a la carcasa de los retrovisores. En función del color de la carrocería, pueden ser blancas, negras o rojas… pero siempre con este diseño.
Cuatro colores
Este color gris es de serie; Por 360–, puede ser rojo, blanco o negro.
Son’de pega’
Estas tomas de aire de los paragolpes -también están en el delantero- son sólo decorativas… pero quedan muy bien.
La iluminación de los faros delanteros es mejorable… y no puede llevar xenón ni en opción.
El vano motor está bien acabado y es accesible.
El alerón trasero incluye la tercera luz de freno.
Los frenos Brembo son de serie, y las pinzas van pintadas en rojo.
Abarth recomienda emplear gasolina de 98 octanos… que cuesta unos 0,12e más por litro que la de 95.
¿Lo quieres más deportivo?
Antes de verano, Abarth ofrecerá dos kits deportivos para el Punto Evo. El primero es el Asseto que, por unos 2.500 euros, incluirá una suspención más deportiva, llantas de 18 pulgadas y frenos más potentes. El segundo es el Esseesse, que añade una preparación del motor que conseguirá, aproximadamente, unos 190 CV. Rondará los 4.500 euros.
Imperfecto, gracias a Dios
Y es, justo entonces, cuando descubro, tal vez, el mayor defecto de este italiano: la palanca de cambio presenta un tacto algo gomoso y blandengue que le resta cierta rapidez y precisión, y que no ‘pega’ nada con el carácter deportivo del resto del coche; lástima, porque un cambio de manejo más ‘durito’, este Abarth ganaría muchísimo.
Tras un buen tramo de autopista, llego a mi carretera de montaña favorita y comienzo a ascender colina arriba a buen ritmo. Ahora que me toca dar trabajo ‘extra’ a los frenos, compruebo que el equipo empleado, firmado por un especialista como Brembo y dotado de pinzas de cuatro pistones en el eje delantero y dos en el trasero, es uno de los puntos fuertes del coche. La frenada es estable, y el tacto del pedal, aunque algo suave, permite dosificarla a la perfección.
Los hay más eficaces, pero…
Comienzo a girar… y, vaya, descubro otro de los apartados donde el Punto Evo ‘necesita mejorar’: la dirección eléctrica que, pese a disponer de un tacto firme y gozar de una buena precisión, se muestra demasiado artificial, como si no hubiera relación entre lo que mueves el volante y lo que giran las ruedas. Poco a poco, me voy acostumbrando a ella… y mi confianza en el Abarth se incrementa al mismo tiempo que transcurren los kilómetros. La suspensión tiene un tacto bastante firme que contiene bien el balanceo de la carrocería... pero, al mismo tiempo, es capaz de ‘digerir’ los baches y las irregularidades sin problemas -una demostración de que lleva una amortiguación ‘de calidad’-.
Eso te permite rodar muy rápido sobre asfaltos en mal estado, percibiendo una agradable sensación de seguridad y sin que el Abarth ‘se descoloque’ en las curvas; de acuerdo, éste no es el deportivo más ágil y rádical… pero te lo pasas muy bien enlanzando curvas casi sin soltar el acelerador, teniendo la sensación de que muy pocos vehículos te podrían seguir en una zona repleta de curvas. ¿Y por seguridad? Todo bajo control: este Punto tiene una enorme adherencia y ‘agarre’… y cuando se acaban -algo que sólo sucede circulando muy al límite-, entra en funcionamiento un control de estabilidad -de serie- que corta de raíz cualquier posible deslizamiento del vehículo.
Vuelvo a la redacción, situando mentalmente cómo se posicionaría respecto a sus rivales en relación precio-prestaciones-diversión… y llego a la conclusión de que ninguno es capaz de acercarse al Punto Evo.
El veredicto de Doménech
El Abarth Punto Evo es uno de esos pequeños GTI que se pueden utilizar a diario, gracias a sus dimensiones ajustadas, consumo razonable y comodidad aceptable… pero que, además, viene ‘adornado’ por un precio más bajo que el de sus rivales -excepto el Skoda Fabia RS-. Asimismo, el Abarth te ofrece las prestaciones y, sobre todo, las sensaciones deportivas necesarias como para que llegues a trabajar cada mañana con una sonrisa… aunque el trayecto haya sido corto.
Los datos oficiales
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
