BMW M3 Cabrio

Un M3 con techo duro retráctilEs la primera vez que el BMW M3 Cabrio no tiene una capota textil, sino un techo duro escamoteable para proteger a los ocupantes de modo óptimo frente a las inclemencias del tiempo. Este techo consta de tres piezas y permite conducir el coche sin limitación alguna en cualquier estación […]


Un M3 con techo duro retráctil
Es la primera vez que el BMW M3 Cabrio no tiene una capota textil, sino un techo duro escamoteable para proteger a los ocupantes de modo óptimo frente a las inclemencias del tiempo.

Este techo consta de tres piezas y permite conducir el coche sin limitación alguna en cualquier estación del año y, además, ofrece un excelente aislamiento acústico. Impresiona por su solidez, acentúa la calidad del coche y, además, ofrece una visibilidad panorámica ejemplar gracias a las grandes superficies acristaladas. Cuando el tiempo lo permite, no hay más que pulsar una tecla para que los tres elementos del techo duro se superpongan de modo completamente automático, accionados por un sistema electrohidráulico, y terminen desapareciendo en la zaga, ejecutando un movimiento muy fluido y ocupando un mínimo espacio en el maletero.

Motor ‘casi’ de F1
Eel BMW M3 Cabrio tiene sus raíces en el nuevo motor de ocho cilindros. Este propulsor de 4.000 cc tiene una potencia de 309 kW/420 CV, e impresiona tanto por su par motor máximo de 400 Nm como por sus revoluciones máximas de 8.400 rpm. Este motor, con su funcionamiento a altas revoluciones típico en los motores M, proviene del actual motor de Fórmula 1 de la escudería BMW Sauber F1. Este concepto logra que también el BMW M3 Cabrio disponga de una enorme capacidad de aceleración y recuperación cuando la gran potencia del motor se aplica en las ruedas posteriores a través del diferencial autoblocante variable M.

Este descapotable es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 5,3 segundos, y continúa acelerando con una fascinante fuerza hasta que la electrónica limita la velocidad punta a 250 km/h. El motor V8 del nuevo BMW M3 es especialmente ligero, ya que tan
sólo pesa 202 kilogramos. En comparación con el motor de seis cilindros del modelo anterior, pesa unos 15 kilogramos menos.

Cambia respecto a un cabrio normal
El BMW M3 Cabrio comparte con el BMW Serie 3 Cabrio únicamente la estructura portante, las puertas, el techo duro, la tapa del maletero, los cristales y los grupos ópticos posteriores. Esto significa que la cantidad de componentes nuevos del BMW M3 Cabrio es más o menos igual que en el caso del BMW M3 Coupé comparado con el BMW Serie 3 Coupé.

Además de distinguirse por su abombado capó de aluminio con marcados nervios, son inconfundibles las entradas de aire y el diseño de los faldones delantero y posterior, las branquias laterales, los estribos, los espejos retrovisores y las llantas de aleación ligera, con el típico diseño de BMW M.

Debajo de la parrilla hay tres grandes aberturas para alimentar de aire de admisión al motor y, además, para refrigerarlo. Estas aberturas están cruzadas por sólidas varillas verticales, que acentúan el característico diseño de la parte frontal del coche. Junto con la parrilla ovoide doble, típica de la marca, y los faros alargados bi-xenón de serie, el nuevo BMW M3 Cabrio tiene una expresión muy dinámica. La estructura de toda la parte frontal está determinada por el aire que necesita este motor de gran potencia. Gran parte del frontal está abierto para surtir con suficiente aire al motor, por lo que se renunció a los faros antiniebla que tienen los modelos convencionales de la serie 3 de BMW, tal como es normal en todos los modelos M. Los estribos son especialmente prominentes, como los del BMW M3 Coupé, y sus dos tensas superficies reflejan la luz de modo definido.

También las proporciones de la zaga le confieren al BMW M3 Cabrio una imagen de gran potencia y superioridad. Las líneas de los estribos, ligeramente descendentes en la parte posterior, y del faldón posterior consiguen acentuar el aplomo del coche. Los perfiles de las cuidadas divisiones del difusor que se encuentran debajo del paragolpes, retoman las formas de las entradas de aire en la parte frontal. La acanaladura que guía el aire y las salidas de escape dobles, que se encuentran casi en el centro de la zaga, logran dirigir la vista hacia la zona inferior central, creando una tensión óptica frente a las líneas horizontales del paragolpes.

El techo del BMW M3 Cabrio termina en la zaga de modo más marcado. Los marcos de las ventanas laterales y los recubrimientos son de serie de color aluminio de brillo mate; opcionalmente, estas piezas pueden tener un color brillante de la gama Shadow Line.

Colores exclusivos
El exterior puede ser de cuatro colores metalizados específicos de M, con los que se acentúan de modo especialmente intenso los perfiles y las proporciones del descapotable. El color rojo Melbourne metalizado llama la atención por su brillo e intensidad. El negro Jerez tiene pigmentación de color azul, lo que le da matices sorprendentes. El fuerte color azul Interlagos lleva pigmentos de color rojo, de manera que la pintura tiende a ciertas tonalidades violetas. El color Silverstone, ya conocido por su uso en los modelos BMW M5 y BMW M6, es un color plata claro con un ligero matiz azul. Además, el nuevo BMW M3 Cabrio puede adquirirse en blanco Alpina, en negro y en Sparkling Graphite metalizado.

Caja de cambios manual de seis velocidades
El M3 Cabrio equipa de serie una caja de cambios manual de seis marchas, con relaciones adaptadas óptimamente al motor de ocho cilindros que puede girar a altas revoluciones. Los cortos recorridos de la palanca, propios de un coche de carreras, y su preciso guiado, logran que el conductor pueda aprovechar al máximo la fuerza de impulsión del propulsor V8, poniendo la marcha apropiada en cualquier situación.

Chasis reforzado
Al igual que el BMW M3 Coupé y la berlina BMW M3, también el nuevo BMW M3 Cabrio tiene tracción trasera. Considerando que las fuerzas de la dirección actúan sobre el eje delantero y las de propulsión sobre el posterior, se cumplen las condiciones ideales para disponer de cualidades dinámicas excepcionales, para que el coche se mantenga siempre fiel a su trayectoria y para disfrutar de una extraordinaria estabilidad. Por su construcción, el nuevo BMW M3 Cabrio tiene la configuración ideal para un coche de altas prestaciones especialmente ágil.

El nuevo BMW M3 Cabrio tiene un chasis que ha sido concebido minuciosamente en función de las características de un coche descapotable. El chasis se basa en el del BMW M3 Coupé y tiene modificaciones específicas en relación con la repartición del peso y considerando la ausencia del techo. Tal como es usual en coches descapotables, se han adoptado medidas adicionales para optimizar la rigidez torsional. En comparación con el BMW M3 Cabrio de la generación anterior, la rigidez torsional del nuevo modelo es bastante superior también teniendo en cuenta la mayor potencia del motor, lo que redunda en un mayor nivel de seguridad y más dinamismo.

Frenos y llantas específicos
Cuenta con los mismos frenos de grandes dimensiones con discos compuestos que también llevan los modelos coupé y berlina. Estos discos de fundición gris autoventilados y perforados, de 360 y 350 milímetros de diámetro en las ruedas delanteras y posteriores respectivamente, están sujetos a la base de aluminio mediante soportes fundidos de acero inoxidable. Dado que esta configuración reduce considerablemente el esfuerzo térmico, la eficiencia y duración de los frenos son mucho mayores. Además, estos frenos de alto rendimiento tienen menores masas no amortiguadas.

El indicador continuo de desgaste permite estar siempre informado sobre el grado de desgaste de las pastillas. En el display que se encuentra en el tablero de instrumentos se indica el kilometraje restante. Así se aumenta el nivel de seguridad y, además, se evitan costes de mantenimiento innecesarios. El vacío necesario para el funcionamiento del servofreno se genera mediante una bomba eléctrica que funciona independientemente de las revoluciones del motor.

El BMW M3 Cabrio lleva de serie llantas de aleación ligera forjada de diseño M específico. Las llantas de las ruedas delanteras son de 8,5 x 18 pulgadas con neumáticos de perfil bajo de medidas 245/40. En el eje posterior, las llantas son de 9,5 x 18 pulgadas con neumáticos 265/40.

En opción control electrónico de la amortiguación
El nuevo BMW M3 Cabrio puede llevar opcionalmente el sistema de control electrónico de la amortiguación (EDC). Este sistema optimiza la fuerza de la amortiguación mediante una regulación electrohidráulica. No solamente se regulan los efectos verticales al forzar la conducción en curvas, sino también se reduce perceptiblemente la tendencia al hundimiento que tiene el coche al frenar o acelerar. Así como puede seleccionarse la programación del motor, también el sistema de control electrónico de la amortiguación (EDC) puede modificarse según las preferencias individuales. El conductor puede seleccionar entre las modalidades «normal», «Confort» y «Sport», para lo que sólo tiene que pulsar una tecla que se encuentra en la consola central.

En términos generales se le concedió especial importancia a un amplio margen de regulación entre la modalidad francamente deportiva y la modalidad de confort. En «Sport», el sistema EDC activa un reglaje especialmente duro. En condiciones en las que no es necesario disponer de un reglaje tan deportivo de la amortiguación, puede optarse por la activación de las modalidades «Normal» o «Confort» para que el sistema reaccione a las irregularidades de la calzada de modo más sensible y con carreras de amortiguación más largas.

Además, el sistema tiene la cualidad de adaptarse automáticamente, sin importar la modalidad activada, ya que modifica de forma rápida y precisa las fuerzas de la amortiguación a cualquier cambio de las condiciones dinámicas. Si un mayor ángulo de giro del volante permite suponer que el conductor tiene la intención de tomar una curva a mayor velocidad, aumenta automáticamente la fuerza de la amortiguación. A partir de ese momento, el EDC cambia inmediatamente de regulación, activando una programación de amortiguación del nivel más duro posible, sin importar qué modalidad activó antes el conductor. Ello significa que el sistema EDC se adapta de inmediato al cambio del estilo de conducción si el conductor opta por conducir más deportivamente después de haber estado conduciendo de forma relajada.

De este modo, el sistema EDC garantiza una perfecta adaptación a cualquier condición dinámica que pueda surgir a los mandos de este descapotable de altas prestaciones. El sistema EDC del nuevo BMW M3 Cabrio logra que sea posible disfrutar en cualquier situación, tanto al conducir relajadamente a baja velocidad o al optar por una conducción francamente deportiva. Con el sistema MDrive opcional, es posible incluir el reglaje preferido del EDC en la configuración memorizada según las preferencias específicas del conductor.

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