Hasta ahora, los experimentos de conducción automática no habían pasado de unos kilómetros en entornos sencillos, como un tramo de autopista sin tráfico. En cambio, el prototipo de Serie 5 con ConnectedDrive Connect de BMW se compone de multitud de elementos capaces de valorar un amplio abanico de situaciones y reaccionar sin necesidad de que el conductor intervenga.
El Serie 5 con CDC presenta cuatro clases de sensores: Radares con unos pocos metros de alcance que supervisan la presencia de objetos en el espacio más cercano; cámaras que funcionan mediante triangulación con los datos que aporten los radares, proporcionando así toda la información sobre los objetos alrededor del coche en tiempo real; sensores de ultrasonido -similares a los de los actuales sistemas de aparcamiento asistido-, cuyo cometido es determinar con precisión las distancias a las que se encuentran los objetos detectados por los otros dos elementos, y escáneres láser que rastrean los alrededores del coche por los cuatro costados, generando un trazado.
El CDC ya ha sido probado en circuito cerrado, pero BMW ha anunciado que ya está examinándolo en carretera abierta. No obstante, todavía tiene un poco de truco, ya que el sistema fue diseñado pensando específicamente en la vía en la que ya está siendo sometido a nuevos tests.
La investigación para conseguir coches que circulen sin necesidad de conductor ha sido una de las favoritas entre los ingenieros de la industria. En los últimos tiempos, incluso Google se ha atrevido a demostrar lo que es capaz de hacer con esta tecnología, presentando un Toyota Prius con piloto automático, y Volkswagen también ha trabajado este campo. BMW asegura que dentro de entre diez y quince años, la conducción asistida será una función más disponible para equipar un vehículo. No obstante,aunque reste trabajo al conductor, no va a restar responsabilidad legal: Así que parece que nunca se podrá bajar la atención al volante…
