
La propuesta de la CE incluye armonizar los plazos de rematriculación del coche en el país de destino: Así, en todos los países se permitiría circular con placas de matrícula provisionales durante 30 días. La transmisión por vía electrónica de todos los datos del vehículo entre las autoridades del país de origen y las del de destino aceleraría el proceso, reduciendo los tiempos de espera actuales para una rematriculación, que hoy por hoy en algunos casos pueden llegar a las cinco semanas. Además, aquellas personas que cambien su residencia a otro país dispondrán de seis meses para matricular de nuevo allí su coche, mientras que quienes se muden temporalmente estarán exentos de cambiar las placas.
También se suprimiría la obligación de tener que pasar otra vez la Inspección Técnica de Vehículos al estar de vuelta en tu país. Se calcula que con todo el papeleo eliminado, los compradores -sean empresas o particulares- se ahorrarían 400 – por cada coche que importen –1.500 millones de euros en total-. Un sector especialmente beneficiado sería el de las compañías de alquiler, ya que con la propuesta de la Comisión Europea podrían distribuir su flota entre los distintos países sin que los coches tengan que estar matriculados allá donde circulen. De esta forma les será más fácil responder a la demanda puntual en ciertas zonas.
Ahora, para que se apruebe definitivamente, la reforma tiene que pasar por el Consejo de Ministros de la Unión Europea y el Parlamento de Estrasburgo. «Lo que debería ser un simple trámite de matriculación continúa siendo en el siglo XXI un procedimiento administrativo largo y tortuoso, con normas diversas y requisitos a veces contradictorios», comentó el director del Departamento de Industria de la Comisión Europea, Antonio Tajani.