Bio-Advance está financiado con fondos europeos y su objetivo fundamental es avanzar en la investigación sobre la cinemática tridimensional de la columna vertebral de los seres humanos, tras sufrir golpes frontales u oblicuos en siniestros de circulación. Hasta ahora, los técnicos empleaban dummies para realizar los diferentes análisis, que se vienen efectuando en el Laboratorio de Tecnologías y Sistemas para la Seguridad en Automoción (TESSA), dentro del parque tecnológico de Motorland-Alcañiz.
El Instituto Universitario de Investigación en Ingeniería de Aragón (Universidad de Zaragoza) lídera este proyecto y ha firmado un convenio de colaboración con la Facultad de Medicina de Albacete, para poder experimentar y realizar ensayos con cadáveres humanos. La donación ya es efectiva y los primeros cuerpos están en Zaragoza, para ser sometidos a las oportunas pruebas, según La Asociación española de profesionales de la Automoción (Asepa).
El proyecto de investigación situará a la Universidad de Zaragoza en la élite mundial de este ámbito. Gracias al programa de becas Marie Curie, el proyecto contará con la participación activa de Francisco López Valdés, ingeniero español del Centro de Biomecánica Aplicada de la Universidad de Virginia (Estados Unidos).
