Como os podéis imaginar, ya tiene unos cuantos años y necesita una puesta al día. Tiene 220.000 kilómetros. Además, querría que me explicarais si es posible cambiar la suspensión por otra de muelles e instalar bloqueos de diferencial delante y detrás.
Restaurar conservando todas y cada una de las virtudes y defectos del BJ 40 sería todo un acierto, ya que estamos ante un verdadero clásico. Dicho esto, es cierto que el vehículo de serie no desarrolla todo su potencial todoterreno.
En Asia y Sudamérica es muy común ver debajo del capó de un BJ motores V6 o V8, con ruedas de 33 pulgadas. En principio, no tendrás ningún problema para instalar el motor, cambio y tránsfer de un Toyota Land Cruiser 90 e, incluso, adaptarle un intercooler, pero necesitarás unas cuantas horas de taller, y esto costará lo suyo. Instalar un turbo en tu veterano propulsor también es factible, pero antes o después, la culata dirá “hasta aquí hemos llegado”, y el elevado kilometraje actual de tu motor desaconseja totalmente esta conversión. Montar una suspensión de muelles tampoco requiere mayores complicaciones.
Puedes tomar como base la de un Defender y, a cortar y soldar. El asunto de los bloqueos es lo más fácil, ya que solo tendrás que comprarlos y montarlos. Metidos en faena, consideramos imprescindible instalar un sistema de dirección asistida y frenos de disco. Como ves, estás ante un “suma y sigue” que te llevará a poseer un TT espectacular, si el bolsillo aguanta. Por último, no olvides que tendrás que homologar todo lo que se te ocurra cambiar, y es mejor prevenir que curar. Antes de empezar, consulta con el ingeniero que vaya a realizar el proyecto de homologación. Esto te evitará tener que modificar cosas a posteriori, con lo que podrás ahorrar tiempo y dinero.
