Mantener los neumáticos del coche en óptimas condiciones es esencial para que circular con unas garantías mínimas de seguridad. No en vano, unos neumáticos en mal estado pueden acarrear desde un mal comportamiento del coche, aumentar el consumo y, en última instancia, provocar un accidente.
Saber cuál es el momento para cambiarlos puede resultar una tarea ardua y dependerá de cómo sea el neumático. Y es que en función de los materiales o la dureza del compuesto (no dura lo mismo una goma deportiva que una eco), ofrecerán más o menos kilómetros. También influirá mucho el comportamiento del conductor. Si practicas una conducción deportiva durarán menos.
También, el clima o las condiciones de la carretera también afectarán a la vida útil de un neumático. Por poner un ejemplo, en un turismo convencional, del segmento de los compactos, de 1.200 kg de peso, tracción delantera y un uso mixto carretera-ciudad a ritmo normal, lo habitual es cambiar los neumáticos delanteros cada 40.000 km y los traseros cada 60.000 km.
En este sentido, diferentes fabricantes de neumáticos recomiendan que tras haberlos utilizado durante cinco años, es recomendable cambiarlos, habiendo realizado inspecciones de los mismos al menos una vez al año. Es cierto que no tienen fecha de caducidad, pero otra recomendación es cambiarlos no pasados los ocho años de su fabricación, independientemente del número de kilómetros realizado (puedes comprobar la fecha de fabricación en el flanco del neumático). Se entiende que, pasada esa fecha, las cualidades del neumático se verían afectadas.
Por ello, lo más importante es hacer un chequeo de manera regular de los neumáticos. Así, podrás detectar cualquier anomalía. También deberás comprobar el grosor del dibujo. Recuerda que estas deben tener una profundidad mínima de 1,6 milímetros (lo recomendable es que no baje de 3 mm). ¿Cómo puedes comprobarlo? Muy sencillo: con un instrumento que mida la profundidad del dibujo o con el efectivo truco de la moneda de un euro. Si la parte dorada queda cubierta, entonces el dibujo del neumático cuenta el grosor recomendable.
Comprobar la presión también es esencial, ya que tendremos que cambiarla en función de la carga del vehículo y los trayectos. Tampoco hay que olvidarse de la rueda de repuesto. Si tenemos algún pinchazo, deberemos tenerla en perfectas condiciones para reanudar la marcha. Todas las presiones están recogidas en el manual del vehículo y, en algunos casos, en una pegatina en el umbral de la puerta del coche.
Los cinco síntomas por los que debes cambiar los neumáticos
- La banda de rodadura presenta un dibujo con un grosor inferior a 1,6 mm.
- El flanco del neumático está dañado o presenta algún tipo de anomalía (bultos).
- El neumático tiene algún agujero con un diámetro superior a los 6 mm.
- El talón (la parte más próxima a la llanta) tiene deformaciones y/o daños.
- El comportamiento del vehículo es errático: vibraciones en la dirección, tacto impreciso…
Si detectamos uno de estos síntomas deberemos cambiar los neumáticos a la mayor brevedad posible. Existen muchos tipos y tendremos que elegir en base a las características de nuestro coche. Así, un 4×4 necesitará una cubierta diametralmente opuesta de la que requiera un deportivo. Lo más recomendable es comprobar qué neumático recomienda el fabricante (puedes verlo en el manual de vehículo o en la ficha técnica), qué uso le vamos a dar o el presupuesto. A partir de ahí, es ponerse buscar y lo podemos hacer de dos maneras. Una es buscando neumáticos online en la casadelneumático.com una web especializada donde encontraremos neumáticos de primeras marcas. Gracias a su buscador, podremos encontrar de manera sencilla el compuesto que mejor se adapta a nuestro vehículo.
Por otro lado, tenemos la opción más tradicional, la de acudir al taller. Así, podemos buscar neumáticos en confortauto.com, elegir los que más nos interesen y pedir cita en el taller que tú elijas. En un plazo de 24/48 horas los habrán enviado. También disponen de un buscador para realizar más sencilla la operación de búsqueda del neumático deseado.
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