Según los datos de la DGT, el grupo de mayores de 65 años suponen un colectivo de riesgo en cuanto a Seguridad Vial, y es que, aunque únicamente suponen el 18% de la población española, suponen el 30% del total de víctimas mortales de accidentes de tráfico. Además, el 33,6% de las víctimas de esa edad se da en vías interurbanas, esto es, mientras pasean por localidades. Es un dato a tener muy en cuenta, y más cuando, según las previsiones de cambios poblacionales, el porcentaje de españoles de más de 65 años pasará, en los próximos 15 años, del actual 18% de la población€ al 30%.
Por eso, ¿qué se puede hacer para reducir el riesgo de accidente de este colectivo? Es lo que ha tratado de averiguar RACE y Liberty Seguros con su estudio ´Movilidad Senior´, para lo que han preguntado a un total de 670 usuario mayores de 65 años y residentes en ciudades de más de 50.000 habitantes sobre sus costumbres como peatones.
Los resultados son muy claros, y dejan ver que una población senior muy activa. En concreto, estos usuarios –que, de media, tienen una edad de 73 años- realizan, en un 82,8%, hasta 2,7 paseos diarios de más de cinco minutos de duración, ya sea por ocio o por necesidad, por ej., para realizar la compra. Por otro lado, las respuestas de los encuestados muestran también que los trayectos de estos usuarios son bastante previsibles, ya que un 71% realiza siempre los mismos desplazamientos y un 69% los realiza, además, por el mismo itinerario, que sólo varían por motivos de obstáculos, como la realización de obras. Una tercera conclusión de la encuesta es que estos usuarios sí muestran problemas de movilidad que pueden afectar a su seguridad como peatones: así, 1 de cada 5 encuestados –el 21,5%- reconoce tener dificultades para caminar y necesitar ayuda, mientras que la mitad de los encuestados reconoce tener problemas de reacción –menores reflejos, agilidad€- y hasta un 36% revela€ que ve mal.
Demandas de los mayores
Así las cosas, este estudio ha querido averiguar qué demandan los usuarios de mayor edad de cara a mejorar su movilidad y seguridad en las vías. Es cierto que la mayoría de los encuestados -un 59,3%- cree que su ciudad está ´Muy adaptada´ o ´bastante adaptada´ a las necesidad del colectivo senior, pero aún queda un 21,9% de usuarios que cree que las ciudades españolas están ´poco´ ´nada adaptadas´ a ellos. De esta forma, las principales demandas recogidas por este estudio pasan por la eliminación de obstáculos, la mejora de la accesibilidad en cruces y semáforos –y el aumento del lapso de tiempo de paso en éstos últimos-, y un mayor respeto del resto de usuarios a las normas de circulación –en especial, se quejan de la velocidad de circulación de las bicicletas por las aceras-.