La investigación, desarrollada por un grupo de expertos antropólogos de la empresa Stripe Partners, es clara en sus resultados con respecto al ahorro que supone para una familia con al menos un hijo viviendo en casa la posesión de un coche con motor eléctrico, en lugar del tracicional coche de gasolina o diesel. Según el mismo estudio y tomando como ejemplo el Nissan Leaf, las familias de esta estructura podrían ahorrar hasta un 60% en su factura de combustible mensual, lo que se traduce como un ahorro de 24 euros al mes en Europa.
El estudio, también apunta que la seguridad (35%), un coste de mantenimiento bajo (28%) y la practicidad (19%) son las principales prioridades a la hora de seleccionar un coche familiar, muy por delante de aspectos como el confort o el rendimiento.
La muestra total para llevar a acabo el estudio fue de 5.568 personas, procedentes del Reino Unido (1033), Alemania (1010), Francia (1003), Italia (1012), España (1005) y Noruega (1041). Incluyó a adultos de cada país, con uno de sus hijos viviendo en casa con ellos y acceso a un coche. Se aplicó una ponderación uniforme para cada país para calcular una «media europea«, que dio los resultados que hemos explicado anteriormente.
En definitiva, el coche eléctrico, que cada vez es más habitual en nuestra vida diaría, empieza a ganar terreno a los coches de combustible tradicional gracias al tremendo ahorro que podruce su uso en una familia.
