La esperada democratización de los vehículos eléctricos será rentable para las principales marcas automotrices europeas. Así lo asegura el estudio realizado por Transport & Environment en base a los análisis realizados por la consultora Syndex. De acuerdo a este documento, los coches eléctricos pequeños -y asequibles- serán una realidad para a partir del próximo año 2025 gracias al descenso continuado de los costes de producción y la reducción de los precios de las baterías.
Evidentemente, la llegada de este tipo de vehículos cero emisiones permitiría el acceso a los mismos a una gran parte de la población y, en línea con la llegada de modelos chinos, serviría como contraataque frente a una ofensiva que se caracteriza también por unos precios contenidos y una calidad cada vez mayor.
Los coches eléctricos pequeños no lastrarán el beneficio de las marcas
En referencia a una posible pérdida de beneficio al fabricar estos coches eléctricos pequeños, el mencionado documento lo deja claro: las marcas europeas podrán obtener un margen de beneficio del 4% con un vehículo eléctrico de batería pequeño producido en 2025 en unas “condiciones de mercado favorables”. En la práctica, por poner un ejemplo, el coste de las baterías bajaría hasta los 100 dólares por cada kWh de capacidad, apuntan las previsiones del estudio.
El citado informe va más allá y también especifica qué otros aspectos implicarían la reducción de costes de producción, con un precio final situado en los 25.000 euros: el uso de baterías de 40 kWh de capacidad para una autonomía aproximada de 250 o 300 km. A diferencia de los modelos cero emisiones actuales, los coches eléctricos pequeños estarían orientados para los desplazamientos diarios y la movilidad urbana, donde la autonomía no es tan determinante.
Como siempre, el precio sigue siendo el principal escollo por el que el mercado de eléctricos no termina de despegar. Por eso mismo, como indica Carlos Rico, responsable de electrificación en la sucursal española de Transport & Environment, “el pequeño modelo de 25.000 euros cambiará las reglas del juego de cara a la adopción pública del coche eléctrico”. Además, incide en que la llegada de los coches eléctricos pequeños servirá para que “los fabricantes europeos puedan competir con sus rivales chinos, que ya ofrecen coches eléctrico pequeños y baratos”.
En sentido, según se ha podido saber de una reciente encuesta, los coches eléctricos pequeños permitiría acelerar el aumento del parque de este tipo de vehículos en el Viejo Continente. De hecho, sostiene que el 25% de los usuarios con intención de compra en nuestro país tienen la intención de adquirir un coche eléctrico el próximo año. Un porcentaje que se eleva hasta el 37% si la opción de compra es un coche eléctrico pequeño con un precio de 25.000 euros. En términos generales, aplicando estos porcentajes, supondría la venta de 103.000 vehículos cero emisiones más al año en España.
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