Cómo prevenir los accidentes por la presencia de animales en la carretera

A los jabalíes les siguen los perros, los animales domésticos que más accidentes provocan, con el 23,7 % del total de los siniestros debidos a animales. Según la investigación del RACC, la mayoría de los incidentes se producen por las correcciones del conductor al ser sorprendido por el animal en la calzada, más que por […]


A los jabalíes les siguen los perros, los animales domésticos que más accidentes provocan, con el 23,7 % del total de los siniestros debidos a animales. Según la investigación del RACC, la mayoría de los incidentes se producen por las correcciones del conductor al ser sorprendido por el animal en la calzada, más que por el atropello o choque contra éste. Algo que los hace especialmente peligrosos, dado que la mayor parte de accidentes con heridos o fallecidos se deben al impacto contra objetos en los bordes de la carretera.

La vía más típica en la que se producen siniestros con animales es la carretera convencional con mucho tráfico que, dentro de una zona rural, se encuentra próxima a poblados. Cuanto más ancha es la vía, más probabilidades de que sucedan este tipo de accidentes. También son habituales dentro de estas zonas urbanas de tamaño pequeño. El RACC también señala las regiones en las que se registran más accidentes con animales: Las provincias de la Cornisa Cantábrica y, en Castillla y León, Soria, León y Burgos.

Ante estos datos, el RACC recomienda que las autoridades estudien detenidamente cuáles son los lugares de paso naturales de cada especie, intentando evitar el «efecto barrera» instalando pasos de fauna, vallados, señales dinámicas que mantengan en alerta a los conductores… Conviene que éstos reduzcan la velocidad en zonas boscosas con escasa visibilidad, prestando especial atención a los trayectos que aún no conozcan. Si detectamos que hay un animal en los márgenes de la carretera, es importante frenar suavemente, tocar la bocina, quitar las largas y dejar sólo las luces de cruce, ya que las luces de largo alcance los pueden desorientar. Aunque parezca que el peligro ha pasado, lo mejor es continuar a baja velocidad, ya que animales como los ciervos marchan en manada y puede quedar todavía algún ejemplar que se asuste e intente cruzar. Y, finalmente, si el choque parece inevitable es mejor colisionar que intentar maniobras de evasión, ya que con éstas últimas podemos acabar contra un objeto de los márgenes o incluso contra otro coche que venga en sentido contrario.

Si ya hemos tenido el accidente, lo mejor es detenernos de forma controlada, notificarlo y avisar a la policía o a la entidad encargada de la protección de la zona.

Scroll al inicio