Un par de años más tarde, se reemplazaría por el más moderno y eficiente M13A, también de 1,3 litros pero dotado de doble árbol de levas y distribución variable, lo que le permite desarrollar 85 CV.
Adiós al diésel
Han pasado más de 12 años desde aquella presentación internacional entre idílicas praderas y montañas, y el Jimny apenas ha cambiado. De hecho, la gama 2011 se parece más que nunca a la de 1999, ya que han desaparecido las versiones de techo trasero desmontable y los motores diésel.
Las primeras, fabricadas exclusivamente en Linares (Jaén) por Santana Motor, llevan ya tiempo sin producirse, mientras que el motor turbodiésel K9K de Renault ha dejado de montarse porque Suzuki ha decidido no invertir en la adaptación del Jimny DDiS a la nueva norma anti-contaminación Euro 5.
Pero aunque el motor diésel ofrecía un rendimiento superior, hay que reconocer que los 11.995 euros que cuesta la versión básica del Jimny de gasolina pronto nos harán olvidarnos de las ventajas del gasóleo.
Y es que sólo el obsoleto Lada Niva -sin aire acondicionado, que en el Jimny es de serie- es más asequible que el japonés, concretamente 453 euros.
En realidad, el Jimny es ahora incluso más barato que cuando se puso a la venta.
Por aquel entonces, cuando aún usábamos la peseta, su precio equivalía a 12.502 euros, a lo que había que sumar 721 euros extra por el aire acondicionado.
Teniendo en cuenta que la súbida del Índice de Precios al Consumo entre septiembre de 1998 y diciembre de 2010 es del 41,7%, a igualdad de equipamiento el Jimny debería costar actualmente 18.737 euros
Ejes rígidos
Aparte de una ganga, el Jimny es un verdadero todoterreno que sustituyó a los exitosos SJ30-40 y Samurai, que a su vez reemplazaron a los LJ10 y LJ20, fabricados desde 1970. A lo largo de estas cuatro décadas, se ha mantenido la arquitectura de chasis de largueros, dos ejes rígidos y caja tránsfer con reductora.
Aparte de un importante aumento de la calidad de los acabados, el Jimny introdujo una mejora definitiva: el uso de muelles como elemento elástico en lugar de ballestas, único modo de asegurar un mínimo nivel de confort acorde con los tiempos actuales.
El uso de ejes rígidos con muelles permite al Jimny ofrecer unos buenos recorridos de suspensión, especialmente en el tren trasero, aporta una gran robustez a las suspensiones de cara al uso más extremo y asegura 19 centímetros de altura libre que permanecen constantes, independientemente de que se compriman o no los muelles y los amortiguadores.
Así, por 12.000 euros, Suzuki ofrece un excelente todoterreno, aunque la concepción radicalmente campera del Jimny nos obliga a pagar una serie de peajes en el uso cotidiano.
En primer lugar, el pequeño motor tetracilíndrico multiválvula exige rodar alto de vueltas si queremos circular con cierta agilidad sobre el asfalto, y en estas circunstancias nos encontraremos fácilmente consumiendo más de 10 litros de gasolina cada 100 km.
Las compactas dimensiones de la carrocería son muy prácticas para uso urbano y para zonas trialeras, pero como contrapartida la anchura de los ejes es también escasa, y el momento de vuelco es más elevado que en cualquier otro todoterreno.
Unos separadores de rueda y los correspondientes aletines adicionales serían muy bien recibidos, aunque se trata de una modificación que requiere la correspondiente homologación.
Puestos a mejorar, la relación de la reductora es un poco larga (2,0:1), algo que en la versión diésel se notaba bastante menos que en esta, debido a la respuesta más generosa de su propulsor a bajo régimen.
Asimismo, la ausencia de un bloqueo de diferencial trasero o de los molestos (pero circunstancialmente útiles) sistemas de control electrónico de tracción nos obligará a tener cuidado para evitar que el vehículo se quede atrapado con dos ruedas en el aire.
¿Qué tal una preparación?
Todas estas cuestiones se solucionan con mayor o menor inversión de forma relativamente fácil mediante una preparación a la que, ya puestos, añadiríamos un pequeño cabrestante y un juego de neumáticos AT o MT, si bien el Jimny, tal y como se comercializa de serie, es ya un formidable todoterreno capaz de enfrentarse a obstáculos imposibles de superar por la práctica totalidad de los todocaminos que acaparan el mercado, incluidos los también económicos Dacia Duster y Fiat Panda 4×4.
Doce años después de haberlo conducido por primera vez, me sigue sorprendiendo la polivalencia de este pequeño 4×4.
Recuerdo que durante la rueda de prensa, en una lujosa sala del hotel Gleneagles -un castillo-palacio rodeado de campos de golf en la localidad escocesa de Auchterarder-, un ingeniero japonés insistía de forma vehemente en que aprovecháramos las travesías por los pueblos de la zona para callejear por ellos y probar a aparcar el Jimny.
Hoy, todos los vehículos han crecido, y este 4×4 es proporcionalmente aún más compacto.
Su maniobrabilidad es sorprendente, aunque ya no estamos tan acostumbrados a renunciar a unas plazas traseras amplias o a utilizar un maletero que requiere plegar la segunda fila de asientos para cargar un par de maletas de tamaño cabina de avión.
Probablemente nos estamos aburguesando, y el Jimny está ahí para recordarnos que no hace falta más.
Por dentro y por fuera
Mode 3… La gama 2011 del Jimny para el mercado español se configura en torno a tres acabados: JX (11.995 euros), JLX (14.295 euros) y Mode 3 (15.295 euros).
El aire acondicionado, todos los sistemas de seguridad y la servodirección son elementos de serie, pero la versión básica prescinde de numerosos guarnecidos, moqueta de tela, elevalunas eléctricos y equipo de audio.
La tapicería mixta de cuero y tela, los guarnecidos integrales en las puertas, el volante de cuero y los faros antiniebla son exclusivos de la versión más equipada, a la cual corresponden las imágenes que ilustran esta prueba.
Algunas mejoras…El paso de los años se ha traducido en el rediseño del salpicadero, que se llevó a cabo en 2005.
Esta actualización afectó especialmente a la consola central, en la que se integró un equipo de audio, se modernizaron los controles de la climatización y se hizo hueco para los mandos de la caja tránsfer, mediante pulsadores; ello hizo desaparecer la segunda palanca, ubicada detrás de la que gobierna el cambio de marchas.
![]() |
Cómo va
Únicamente gasolina…El 1.3 16v SOHC de 79 CV dio paso en 2000 a un más moderno 1.3 16v DOHC de 85 CV.
En 2004 se introdujo la posibilidad de disponer de un motor diésel, concretamente un 1.5 sobrealimentado, de origen Renault, que entregaba 65 CV.
Se trataba de una interesante alternativa, pero se quedaba algo escaso de potencia.
En 2006 apareció su evolución, con 85 CV y 200 Nm.
En 2011, la entrada en vigor de la normativa de emisiones contaminantes Euro 5 ha hecho desaparecer la alternativa diésel.
Escalera…El chasis de largueros (1 y 2) y travesaños (3 y 4) apoyado sobre dos ejes rígidos (5 y 6) es uno de los rasgos distintivos del Jimny frente a otros modelos económicos con arquitectura de turismo como el Fiat Panda 4×4 o el Dacia Duster.
Cada uno de los dos ejes va guiado por dos largos brazos longitudinales (7 y 8) y una barra Panhard de control transversal (9). En el tren delantero podemos observar que tanto la barra de la dirección (10) como la de reenvío (11) quedan poco expuestas a impactos, si bien no ocurre lo mismo con la parte inferior de la barra estabilizadora (12 y 13).
Los neumáticos montados de serie son unos Bridgestone Dueler H/T 684 en medida 205/70-15.
Están marcados como M+S (barro más nieve), pero se trata de ruedas orientadas para usarse en asfalto y, como puede verse, se les «atraganta» el campo.
Fíjate en: El Jimny cuenta con las cotas propias de un verdadero TT. Su corta batalla favorece la presencia de un buen ángulo ventral. El mayor riesgo vendrá de las inclinaciones laterales, debido al alto centro de gravedad. |
La opinión TT
|
Ficha técnica y gama / Suzuki Jimny 1.3 VVT
Fíjate en: La única mecánica disponible en la gama 2011 corresponde al motor 1.3 de gasolina, ya que el diésel montado hasta ahora correspondía a especificaciones Euro4. En otros mercados se ofrece un veterano cambio automático de cuatro relaciones como opción. |
Equipamiento, Seguridad y Funcional
Atento a: Si nos decantamos por la versión básica (JX), lo único que echaremos en falta será un equipo de audio. El resto del equipamiento extra ofrecido por las versiones JLX y JLX Mode 3 es prescindible. |
Por fuera
![]() |
![]() |
![]() |