Samar’t, la empresa más importante a nivel mundial en la fabricación de placas de matrícula, acaba de realizar un curioso estudio del que han extraído que al 52,6% de los españoles les gustaría cambiar el diseño de su matrícula, mientras que el 53,8% la personalizaría incluyendo frases cortas, nombres, cifras significativas que recuerden fechas… Entre las opciones más demandadas, casi la mitad pondría su nombre o el de sus hijos, el apodo que utiliza su pareja, sus iniciales o las de entidades como su club de fútbol favorito. En segundo lugar, escogerían frases o palabras específicas que reflejan pensamientos o deseos de su dueño.
Un negocio muy lucrativo en Reino Unido
De hecho, estas matrículas personalizadas son muy conocidas en Reino Unido, donde se subastan, de forma pública y a través de webs como dvlaregistrations.direct.gov.uk, por precios que arrancan en unas 300 libras -352,23 euros- cada matrícula. Es más, cuando alguien ya tiene una matrícula, puede revendérsela a otro conductor a cambio del dinero que el dueño considere. De esta manera, podemos encontrar ejemplos como la matrícula ‘VIP 1’, que pertenece al multimillonario ruso Roman Abramovich -famoso por ser el dueño del Chelsea F.C. inglés-, que pagó por ella 285.000 libras -334.533e- en 2006. Aunque mucho más llamativo es el caso de la matrícula ‘1’, adquirida por Saeed Abdul Ghaffar Khouri, un rico hombre de negocios de Qatar que pagó por ella 7 millones de libras -8.218.700e- en una subasta benéfica… y que, en el momento de adquirirla, afirmó no saber a qué coche se la pondría -finalmente, se la colocó a su Bugatti Veyron-.