Respeta las normas, circula con precaución, y adapta tu conducción a las circunstancias de la vía. Evita los desplazamientos bajo estas condiciones, y consulta el estado del trafico, las carreteras y la previsión del tiempo.
Vehículo
– Comprueba los niveles de líquidos, con especial atención al anticongelante. Es importante un perfecto estado de frenos y dirección, batería, así como el dibujo de los neumáticos. Revisa las escobillas, ya que en caso de nieve, hielo o lluvia sufrirás el efecto -spray- de los vehículos que circulan delante.
– No olvides las cadenas o los neumáticos de invierno si vas a circular por zonas montañosas o con riesgo de nieve, así como el resto de elementos necesarios en caso de avería: triángulo de emergencia, chaleco reflectante, gato, correas, herramientas y juegos de luces, así como fusibles de repuesto. Es recomendable también llevar una manta ante la posibilidad de quedar retenido por nieve.
Antes de salir
– Programa el desplazamiento con antelación. Infórmate en el teléfono de la DGT 900 123 505 y lleva los números de contacto de tu asistencia. Comprueba también la meteorología.
– Estudia el trayecto, ya que en caso de retención prolongada por nieve podrás buscar una ruta o paradas alternativas, sobre todo si viaja con niños.
– No te pongas horas de llegada, ni intentes recuperar el tiempo tras una retención: cuando pensamos que la circulación se restablece, puede aparecer de nuevo las retenciones, y una leve distracción puede provocar colisiones por alcance aumentando el riesgo si la vía está helada o con nieve.
En ruta
– La vía puede convertirse en una pista de hielo. Evita zonas sombrías (zonas arboladas en los laterales de la carretera) y ten en cuenta que a primera hora puede existir hielo. Hay que adecuar en todo momento la velocidad a la zona de visibilidad y a la adherencia del suelo.
– No realices una conducción continuada durante mucho tiempo. Descansa frecuentemente, ya que la conducción invernal aumenta la fatiga y reduce su capacidad de conducción, aumentando el riesgo.
– Si vas a utilizar la calefacción para eliminar el vaho, ten en cuenta la somnolencia, sobre todo a primera hora y última hora de la tarde. Para ello, baja un poco las ventanillas para que entre el fresco.
– Nunca bebas alcohol si vas a conducir, respeta las normas y haz utilizar los sistemas de retención para todos los ocupantes.
– Mantén siempre la distancia de seguridad, sobre todo en caso de lluvia, niebla, hielo o nieve, y prevé situaciones de peligro con tiempo suficiente, indicando de la situación al resto de los conductores.
– En caso de observar o sufrir un accidente, recuerda la conducta PAS: prevenir nuevos riesgo, avisar a las emergencias y socorrer a los heridos en los casos de extrema gravedad. Mantente en una zona segura mientras esperas.
– Si vas a conducir de noche, sé consciente de la fatiga provocada por la tensión. Revisa y limpia tus faros, ya que pueden quedar inutilizados al acumularse nieve, adapta su altura a la carga del vehículo, y aumenta la distancia de seguridad. Ante el primer síntoma de cansancio, para y descansa.
– Si el asfalto por el que se circula es muy deslizante, hay que actuar con mucha suavidad sobre el volante, el acelerador y el freno. Hay que utilizar marchas largas si la adherencia disminuye de forma drástica. Ten en cuenta, además, la necesidad de aumentar la distancia de seguridad y procurar evitar los adelantamientos. Y si el suelo es muy deslizante, puedes quitar aire a las ruedas, ajustándolas a su nivel lo antes posible.
– Si se aparca en una zona con riesgo de heladas, prevé la congelación de las pastillas de freno. Además, ten en cuenta levantar los limpiaparabrisas, ya que el peso de la nieve puede romper los ejes.
– En caso de inmovilización por una fuerte nevada hay que aparcar dejando vía libre a las máquinas quitanieves, apagar el motor y no abandonar el vehículo si no existe un refugio cerca.
– Evita los adelantamientos si no tienes la completa seguridad de que se puede realizar sin riesgos.
– Dispón siempre de combustible suficiente; además de disponer de más tiempo de calefacción en caso de emergencia, te aportará peso adicional para circular en zonas resbaladizas.
Fuente: RACE
