El mercado de los vehículos eléctricos ha experimentado un crecimiento en la última década y se ha convertido en un componente fundamental de la revolución en la industria automotriz. Gobiernos de todo el mundo están promoviendo la adopción de vehículo eléctrico a través de incentivos fiscales y regulaciones más estrictas sobre las emisiones. Pero, a pesar de su rápido crecimiento, el mercado de vehículo eléctrico aún enfrenta desafíos en términos de infraestructura de carga, costos iniciales y la necesidad de abordar cuestiones de sostenibilidad en la producción de baterías.
Todos estos temas se han tratado en el Global Mobility Call, evento de movilidad sostenible celebrado en Madrid. Allí, la consultora PwC ha aprovechado la ocasión para presentar su Informe eReadiness 2023 sobre el desarrollo de la electromovilidad. Este estudio analiza la movilidad eléctrica en 18 mercados y divide a los consumidores en tres grupos: propietarios de vehículos eléctricos, futuros compradores y escépticos, revelando perfiles distintos.
Las diferencias entre los actuales propietarios, los futuros y los escépticos son notables, tanto en sus características como en la representación del mercado. De los más de 12.500 consumidores el 6 % son propietarios de vehículos eléctricos, el 62 % son futuros compradores de vehículos eléctricos de aquí a cinco años y el 32 % son escépticos respecto a la electromovilidad.
Perfiles de consumidores de vehículos eléctricos
En lo que respecta a los actuales propietarios en su mayoría son hombres, con aparcamiento privado en casa. Con una edad media de 43 años, presentan unos ingresos medios brutos anuales de 91.000 euros.
El 86 % de los que cuentan actualmente con coches eléctricos, utilizan sus vehículos para desplazarse al trabajo aproximadamente 4,4 días a la semana, cubriendo una distancia de 23 kilómetros en promedio. Además, la mayoría de ellos afirma haber aprovechado ayudas públicas para adquirir su vehículo y suelen cambiar de coche cada 5,9 años.
Los futuros compradores de vehículos eléctricos tienen un perfil diverso presentando una renta media de 74.000 euros, los cuales son mayoritariamente hombres de 42 años. Este grupo urbano también utiliza vehículos para ir al trabajo 4,2 días a la semana con los que recorren 28 kilómetros aproximadamente y se cambia de automóvil con menos frecuencia que los propietarios actuales, rondando los 8,1 años.
El último grupo analizado son los escépticos, que no tienen intención de comprarse ningún coche eléctrico en los próximos años debido a los principales motivos de su escepticismo entre los que se encuentran: los tiempos de carga, el alcance limitado de los vehículos, la incertidumbre sobre el tiempo de vida de las baterías y el precio superior en comparación con los automóviles de combustión. Mayoritariamente son mujeres, con una edad promedio de 49 años y un poder adquisitivo que ronda los 49.000 euros. Estos consumidores son menos propensos a cambiar de automóvil y tienen un poder adquisitivo más bajo.
Para Manuel Díaz, socio responsable de automoción en PwC, “la menor renta disponible de las familias en España respecto a otros mercados es una de las principales explicaciones de la falta de empuje de las matriculaciones de vehículos electrificados en nuestro país que, en lo que va de año, apenas supera el 10 % del total de las ventas, muy por debajo de la media de la UE y de los principales países europeos. Una situación que está todavía más presionada por el actual contexto inflacionista y el endurecimiento de las condiciones de financiación por las subidas de los tipos de interés y que dejará de ser relevante en la medida que los fabricantes consigan ajustar el precio de los vehículos”.
Madurez de la electromovilidad en España
El informe también incluye un índice de madurez de la electromovilidad en 18 mercados, destacando el estado de la oferta y la demanda, las infraestructuras y las ayudas públicas. España, con un índice de madurez de 2,2 puntos, se mantiene entre los países donde la movilidad eléctrica está menos desarrollada, junto con Italia, Emiratos Árabes Unidos, Japón, Polonia y Australia. En contraste, Hong Kong, Noruega y China lideran el mercado de vehículos eléctricos con índices de madurez de 4,2, 4 y 3,6 puntos, respectivamente.
Tal y como indica Manuel Díaz, a pesar de que España ofrece una variedad de ayudas públicas para la compra de vehículos eléctricos, estas suelen ser ineficientes y llegan mucho después de la adquisición del automóvil, a menudo vinculadas a desgravaciones fiscales. En contraste, Portugal, con un nivel de renta similar al de España, ha logrado duplicar la penetración de vehículos eléctricos gracias a la aplicación directa de ayudas en el momento de la compra.
En cuanto a las infraestructuras de carga, aunque ha habido avances en el último año, España aún tiene trabajo por hacer. Según el último Barómetro de la Electromovilidad en España, el país cuenta con 18.128 puntos públicos de recarga eléctrica, un aumento de 4.632 en comparación con el año anterior, pero aún lejos de los objetivos establecidos.
[sf_btn type=»newsletter» txt=»¿Quieres recibir nuestra newsletter? Haz clic aquí» url=»https://news.luike.com/registro-autofacil-luike-news»]
