Todavía no sabemos cuál fue la reacción del jefe del chofer de este Chrysler 300C limusina cuando llegó a su despacho y le dijo «el vehículo ha sido arrollado por un tren». Seguramente, la siguiente pregunta fue «¿por qué?» a lo que le debió responder: «porque quise cruzar un paso a nivel y el coche se quedó encajado».
Efectivamente, el conductor de dicha limusina quedó, literalmente, encallado en las vías del tren cuando se disponía a cruzarlas con la mala suerte de que, a pocos minutos, un tren de mercancías se aproximaba a toda velocidad. La máquina ferroviaria, pese a las indicaciones de los allí presentes no pudo detenerse atropellando brutalmente al coche y desplazándolo durante más de un minuto hasta que consiguió detenerse.
Por suerte, nadie resultó herido en el accidente pero seguro que a partir de ahora, a ese chófer no se le ocurre volver a cruzar un paso a nivel. Aquí te dejamos el vídeo.