
Veamos este decálogo:
- Mínimo de 10 horas de clases teóricas para el alumno.
- La enseñanaza no debe limitarse a la explicación de la norma sino señalar el porque de la misma
- No quedarnos en lo prohibido sino también mostrar lo peligroso.
- A propósito de esto, más relevancia en la seguridad vial
- Cambio de actitudes y de aptitudes.
- No enseñar para aprobar sino también para aprender.
- Mínimo de clases prácticas obligatorias.
- Clases prácticas de grupo también.
- Enseñar al alumno como es una conducción eficiente.
- Más importancia a las clases de primeros auxilios.
Además de estas recomendaciones, José Miguel Báez ha comentado la tendencia negativa de los alumnos a tener conocimientos previos a las clases prácticas que generan en él vicios y automatismos inseguros y que el profesorado debería tener cursos de reciclaje, entre otras muchas propuestas.