¿Qué versión del DS 4 interesa más?

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Así es la nueva versión Connected Chic del DS 4

DS 4 Performance Line, máxima sofisticación

La gama del DS 4 no para de crecer. Tras el lanzamiento de la variante DS 4 Crossback o de versiones como la Connected Chic, la oferta abarca opciones para todos los gustos. Aquí te ayudamos a elegir la más equilibrada.

El DS 4 es un coche compacto con ciertas connotaciones de crossover como la carrocería ligeramente elevada. Su última actualización importante fue a finales de 2015, con la que se buscó un diseño diferenciador; como ejemplo, las puertas traseras con manetas escondidas tienen las ventanillas fijas. Para reforzar su lado crossover se ha creado una versión con más altura de suspensión y detalles de SUV llamada DS 4 Crossback.

Dejando a un lado el diseño, el DS 4 –que aún sigue siendo conocido como Citroën DS4 por muchos usuarios– responde con un interior bien rematado, motores dignos y un funcionamiento general correcto. La oferta es completa con cuatro niveles de acabado, con climatizador, Bluetooth y llantas de aleación desde el primer escalón. Hay cinco motores, dos de ellos gasolina de 130 y 165 CV, y tres diésel de 100, 120 y 180 CV, los dos más potentes de cada combustible sólo con cambio automático.

El más aventurero: DS4 Crossback

Para reactivar la ventas del DS 4 y entrar más de lleno en el jugoso segmento de los SUV y crossover compactos, DS lanzó la versión más radical DS 4 Crossback, con la suspensión más elevada, protecciones en bajos y pasos de rueda al estilo campero, barras de techo de aluminio, llantas negras y algún detalle más de diseño. Cuesta unos 1.300 euros más, pero tiene aún más equipamiento, con pantalla táctil de 7 pulgadas desde el acabado más sencillo de cuatro. Está disponible para todos los motores; excepto con el diésel de 100 CV.

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En Autofácil hemos podido probar dos de sus motorizaciones más interesantes: el 1.2 PureTech de 130 CV y el 1.6 BlueHDI de 120 CV. El pequeño motor triclíndrico 1.2 de 130 CV del DS 4 Crossback muestra una suavidad propia de una mecánica de cuatro cilindros y unas prestaciones acordes a su potencia. Además, pese a su pequeña cilindrada es capaz de circular en marchas largas con soltura. Por lo demás, cabe reseñar el excelente equilibrio entre confort y estabilidad conseguido en el DS 4 Crossback: su carrocería balancea poco, la dirección es precisa y tiene la dureza exacta y, además, ofrece un confort de marcha más que razonable.

Por su parte, el DS 4 Crossback 1.6 BlueHDI de 120 CV, asociado al cambio automático EAT6, se trata de uno de los mejores propulsores diésel de su cilindrada por su equilibrio entre suavidad, consumo -3,9 l/100 km- y porque es capaz de mover al Crossback con mucha agilidad para tratarse de una versión básica: acelera de 0 a 100 km/h en 11,4 segundos y alcanza 190 km/h.