Citroën no ha dejado muy claro si participará o en la prueba o si, por el contrario, sólo realizará unas vueltas de exhibición, aunque nos decantamos más por lo segundo teniendo en cuenta la limitada autonomía de este tipo de vehículos. La encargada de recorrer estos primeros metros (el día 10 a partir de las 13.30 horas) será la piloto belga Vanina Ickx.
300 CV de potencia
El modelo que veremos este fin de semana adopta la forma de un deportivo compacto de sólo 3,85 metros de longitud, 1,87 m de anchura y 1,20 m de altura, con propulsión eléctrica, un chasis tubular y carrocería fabricada íntegramente en carbono (el peso es de sólo 1.150 kg). Para mover el Survolt hasta una velocidad máxima de 260 km/h, Citroën ha utilizado dos motores eléctricos con una potencia combinada de 300 CV, suficientes para rebajar la barrera de los cinco segundos en el 0 a 100 km/h y la de los 22 segundos en el kilómetro con salida parada.
Para alimentar estos motores se han montado dos baterías de iones de litio con una capacidad de 31 kW, suficientes para mantener el coche en funcionamiento durante 200 km (aunque penalizan mucho el peso del conjunto, ya que cada una de ellas pesa 140 kg). Aceptan dos modos de recarga: 10 horas en un enchufe convencional de 220 V o dos horas en una alimentación específica.
Si quieres ver cómo rueda este deportivo eléctrico en Le Mans, síguenos con atención porque te traeremos los vídeos tan pronto como dispongamos de ellos.
