Los cálculos realizados por Delgado se hacen pensando que la carga del automóvil será -lenta y nocturna-. Esta opción sería la más barata, ya que se recarga en -tarifa de valle- y se adaptaría también a las necesidades comunes del usuario. Para el que tenga la urgencia de una carga rápida y diurna habrá -un servicio Premium- más caro.
En el acto, celebrado en la Universidad CEU San Pablo, Delgado también ha aprovechado para asegurar que -la infraestructura de red- está preparada para asumir la demanda de consumo de los coches eléctricos. Un millón de coches eléctricos, ha explicado, -supondría un aumento de la demanda del 1%-, por lo que las eléctricas -no necesitarían hacer grandes inversiones en generación-. Los principales progresos, por tanto, cabe realizarlos en la tecnología de las baterías. -En diez años tendrán que reducir su coste tres veces y triplicar su productividad. Y creo que lo van a conseguir-, ha añadido.
Sobre las posibilidades tecnológicas ha hablado también el director general de Producto de Toyota España, José Manuel Méndez, que ha señalado que, aunque -el coche eléctrico sea una buena idea a nivel macroeconómico-, aún quedan años para que un cliente se compre -un vehículo eléctrico en condiciones- En la misma línea que Delgado, ha afirmado que el coche eléctrico no podrá tener una gran expansión -mientras las baterías tengan tan poca densidad energética-. Hasta que llegue ese momento, existen etapas intermedias, algunas ya disponibles y viables como el vehículo híbrido, que ha sido -una historia de éxito-, a juicio de Méndez. Si el presente es el híbrido, el futuro más inmediato puede ser del híbrido enchufable, un vehículo que -es eléctrico durante los primeros 25 kilómetros e híbrido durante los siguientes-.
La perspectiva del regulador la ha expuesto el vicepresidente de la Comisión Nacional de la Energía, Fernando Martí Scharfhausen. Según ha aseverado, -el coche eléctrico tendrá una tarifa para que los primeros años pueda salir adelante con holgura-. Asimismo, sobre el modelo de consumo, ha anunciado que la CNE hará -todo lo posible para que sea fácil cargar en valle y difícil cargar en punta-. Asimismo, y teniendo en cuenta que España -tiene un buen sector de renovables-, Martí ha sugerido no reducir la inversión en él.
Y es que la importancia de que se apueste desde la Administración Pública por incentivar este sector ha sido uno de los mensajes más repetidos a lo largo de la jornada. -El primer elemento dinamizador deben ser los gobiernos-, ha recalcado la vicepresidenta de Hitachi Consulting, Mariola Pina. -No necesariamente con subvenciones, también mediante la incorporación de activos-, ha agregado. Para Pina, el esfuerzo I+D+i es fundamental para alimentar un sector, como el del coche eléctrico, que -es una oportunidad para crear riqueza-.
Y es que, en términos macroeconómicos, y si en 2020 se alcanza el objetivo de llegar al millón de vehículos eléctricos en el parque español, se podrían llegar a crear 335.000 puestos de trabajo. Es la cifra que ha presentado el director general de la Fundación FITSA, Óscar Ciordia. Éste, además, ha incidido en la importancia de vincular la tecnología y estructura de aprovisionamiento energético. -Si esto no ayuda a cambiar el mix energético, se quedará en un mero avance tecnológico-.
Por lo apuntado en la sesión, el coche eléctrico puede suponer el catalizador de relevantes avances tecnológicos. Su uso -abrirá las puertas a la exploración de nuevos materiales-, ha observado el director de la Escuela Superior de Enseñanzas Técnicas de la Universidad CEU Cardenal Herrera; Fernando Sánchez.
Ha presidido el encuentro el presidente del Instituto Choiseul España y director de la Cátedra de Geoconomía y Estrategia Internacional CEU, Eduardo Olier. La moderación del debate ha corrido a cargo del presidente de Ecointeligencia Empresarial, Miguel Ormaetxea.
