Este nuevo propulsor tiene un consumo de gasóleo de 4,9 litros cada cien kilómetros y unas emisiones de dióxido de carbono (CO2) de 129 gramos por cada kilómetro recorrido. Este bloque de cuatro cilindros utiliza tecnología common rail y cuenta con un sistema de turbocompresor secuencial de dos fases de carga. Los clientes tendrán la posibilidad de combinar esta mecánica con tracción delantera o integral y se asociará a tres versiones de carrocería diferentes.
El Insignia 2.0 CDTi BiTurbo es capaz de acelerar de cero a cien kilómetros por hora en 8,7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 230 kilómetros por hora. Todas las versiones con caja de cambios manual contarán con el sistema Start/Stop. Además, a partir del próximo ejercicio todos los modelos dotados de tracción integral se podrán solicitar con un chasis SuperSport que incorpora la suspensión delantera de la variante deportiva OPC.
Fuente: Europa Press