
Con buenas cualidades para rodar tanto dentro como fuera de asfalto, el primer Range Rover, conocido como -Classic-, no contaba con las características de lujo que pregonaba -no tenía moquetas, ni madera, ni cuero-, aunque pronto fue mejorando su equipamiento para alcanzar el nivel de exclusividad que demandaba su clientela. De hecho, estuvo evolucionando durante 25 años, hasta que en 1994 salió al mercado la segunda generación, conocida como P38a.
El P38a supuso la continuación del éxito del concepto del -Classic-, aunque se hizo más hincapié en el lujo para atraer a clientes de berlinas premium convencionales. Desde un principio se ofrecía tapicería de cuero y acabados en nogal, que se unían a los motores BMW más rápidos montados nunca por el Range Rover. Esta generación se mantuvo hasta el lanzamiento de la tercera -L322-, en 2001, que se mantiene en la actualidad. Precisamente, esta generación supuso un salto hacia delante por su capacidad de conducción en carretera y fuera de ella, e incluso el CEO de la marca, Bob Dover, denominó a este Range Rover -vehículo más capaz del mundo, con la mayor amplitud y destreza jamás producido-.
Esta generación se ha convertido en la más vendida de la historia de este modelo, un privilegio en el que tiene mucho que ver el Range Rover Sport lanzado en 2005, una versión más deportiva para clientes que prestan mayor atención a la conducción en carretera -en 2007 fue el vehículo Land Rover más vendido en todo el mundo-.
A finales de año, la familia se ampliará con la llegada de una nueva versión, que será mucho más compacta, ligera y eficiente. El LRX, como será bautizado, dispondrá también de tracción 4×2, como te contamos hace apenas una semana.
Para Phil Popham, Director General de la compañía, -El Range Rover es en realidad cuatro vehículos en uno. Es un automóvil de lujo para los siete días de la semana; un vehículo de ocio que se conduce a lo largo y ancho de la carretera, un coche de alto rendimiento para los viajes a larga distancia, y un vehiculo de trabajo para el campo-.
No cabe duda de la importancia de este modelo para la historia de la marca británica, como reconoce el propio Phil Popham: «Land Rover tiene un gran historial en innovación de producto. Sin embargo, el Range Rover sigue siendo, probablemente, el más importante que hemos lanzado en toda nuestra historia. Es uno de los vehículos más destacados en la historia del motor-.
Con la buena salud con la que cuenta, el tirón de la versión Sport y el nuevo LRX, no cabe duda de que seguirá siendo el buque insignia de la firma durante mucho tiempo.