Esta nueva generación, como le gusta llamar al fabricante escandinavo, seguirá apostando por las baterías de iones de litio de la marca Ener1 y ofrecerá el aire acondicionado de serie en todas las versiones -que son pocas-. El corazón del City será el THINK G4 EV DRIVE CONTROLLER, la cuarta generación de su sistema de propulsión eléctrica. Esto no quiere decir que aumente las prestaciones o la autonomía -se mantiene la punta de 110 km/h y la autonomía de 160 kilómetros-, aunque la marca asegura que nos encontramos ante el sistema eléctrico más avanzado del mundo en lo que a seguridad, autonomía real y eficiencia se refiere. Esto último no podemos ni confirmarlo ni desmentirlo, pero para reafirmarse en sus palabras, Think ofrece una garantía de cinco años o 100.000 kilómetros -lo que antes ocurra- tanto para el coche como para la batería.
Todos estos cambios hacen ahora más atractivo al City, como asegura el jefe de marketing de la marca noruega, Michael Lock: -La principal preocupación de Think es ofrecer flexibilidad al cliente, y esta Navidad hemos ido un paso más allá con la introducción, por primera vez, de una configuración de asientos 2+2. ¿Quieres llevar a los niños al colegio? Lo puedes hacer. ¿Necesitas transporter una carga pesada? No hay problema; los asientos se pueden esconder para dar la misma capacidad que hasta ahora-.
Con la llegada inminente de modelos más sólidos como el Citroën C-Zero, el Peugeot iOn, el Mitsubishi i-MiEV o el Nissan Leaf, Think necesitaba -hacerse más coche- para no ser engullido por estos nuevos eléctricos, y éste es el primer paso. Veamos si vienen más.