Y la verdad es que algunos de ellos son de lógica, pero conviene hacer un repaso de todos ellos, por si nos ayudan a aclararnos a la hora de escoger un seguro u otro. Según esta web, para coches de menos de dos años es muy aconsejable contratar a todo riesgo y entre esta edad y los 10 años pasarlo a un seguro a terceros ampliado, es decir con robo, incendio y lunas, por ejemplo. Cuando el coche ya pasa de los 10 años, generalmente no interesa asegurar más que el terceros básico y ahorrar dinero.
Si vas a contratar un seguro a todo riesgo debes tener en cuenta los siguientes aspectos:
-Valor del coche nuevo: Muchas aseguradoras incluyen durante dos años el valor de reposición del coche, es decir, te pagan lo que el coche vale nuevo.
-Pequeños golpes: Los costes de reparación de un arañazo o de un golpe pequeño son elevados, pero cuando el coche es nuevo todo el mundo suele querer llevarlos impecable.
-Aparcamiento en la calle: Lógicamente, si el coche está en la calle, hay mayores riesgos de que lo golpeen o lo roben
-Uso habitual: también lógico, cuanto más lo usas, más riesgo de arañarlo o sufrir un golpe.
Si tu coche ya pasa de unos años te interesará más un seguro a terceros o un terceros ampliado. Los principales motivos por lo que esto es así son:
-Valor venal: El valor del coche en el momento de sufrir un accidente puede ser suficientemente bajo como para que ala reparación de cualquier golpe suba por encima del valor del coche, declarándolo siniestro total. Con este riesgo encima, lógico que no pagues un seguro más caro.
-Aparcamiento en garaje: Si tu coche se guarda en garaje privado, será más difícil que te lo encuentres con un golpe o que te lo roben. No te interesará tanto contratar estos riesgos.
-Uso: Si usas poco el coche el riesgo de tener un accidente con él es menor.
Lógicametne todo esto dependerá de las circunstancias y del coche del que estemos hablando. Pero con todo, para comprobar diversos precios de distintos tipos de pólizas, lo mejor es emplear comparadores.