Buen currículum
El lanzamiento del Mazda RX-8 en 2003 causó auténtico furor en el mercado global. Desde entonces, el RX-8 ha recibido más de 50 premios mundiales, entre los que destacan los de Coche del Año 2003 en Japón RJC, Coche del Año 2003 de la revista australiana Wheels, Motor Internacional del Año 2003, Coche del Año 2004 en Singapur, Mejor Deportivo del Año 2004 en EE.UU. y Coche del Año 2004 en Reino Unido. También fue incluido en la lista de los diez mejores vehículos de 2004, 2005 y 2006 de la revista Car and Driver. En conjunto, Mazda ha vendido cerca de 167.000 RX-8 en todo el mundo.
Cambios en el exterior
De cara a 2009, el RX-8 recibirá mejoras de diseño que renovarán su estilo y cambiarán su imagen sin modificar su línea básica. Estas mejoras del modelo 2009 incluyen: remodelación de los paragolpes delantero y trasero y del frontal; faros delanteros y traseros con un acabado de mayor calidad y más deportivo; y tubos de escape más grandes (ahora tienen 90 mm de diámetro). El RX-8 2009 también incorpora llantas con un nuevo diseño de cinco radios, reminiscencia simbólica y deportiva del motor rotativo, con distintas disposiciones para cada tamaño de llanta.
Más espacio interior
El RX-8 2009 ha experimentado pequeñas mejoras que aportan un diseño interior más sencillo y funcional, y redundan en un mayor placer de conducción. La forma del panel de instrumentos central se ha rediseñado para transmitir una sensación de movimiento dinámico, y también se ha añadido una zona roja variable al tacómetro que aumenta cuando el motor alcanza la temperatura de servicio. Además se ha incorporado un nuevo volante, y se han rediseñado los asientos traseros y delanteros.
El piso de la cabina, extremadamente bajo, permite montar los asientos a menor altura en el chasis. Si a esto se añade un panel de instrumentos más bajo, el centro de gravedad se rebaja considerablemente, dejando una visibilidad excepcional a los ocupantes. Los diseñadores de Mazda se concentraron en la forma del respaldo de los asientos delanteros y en los asientos traseros para garantizar que quedase espacio suficiente para las rodillas de los ocupantes de las plazas traseras. La posición de los raíles de los asientos delanteros deja un espacio máximo para las piernas de los pasajeros de la parte trasera.
Se mejora el rendimiento del motor rotativo
El RX-8 es un deportivo puro de principio a fin, y ofrece una experiencia de conducción emocionante y dinámica. Para 2009, los ingenieros han mejorado la rigidez de la carrocería del RX-8 añadiendo refuerzos estructurales, con una barra trapezoidal y mayor rigidez en las torretas de la suspensión delantera. También se ha reconfigurado la geometría de la suspensión trasera, para una mayor estabilidad, y se ha aumentado la rigidez del eje, rebajando así los niveles de rumorosidad y mejorando el comportamiento.
Además, se ha reducido la desmultiplicación diferencial de 4,444 a 4,777 en los vehículos con transmisión manual, con objeto de mejorar el rendimiento en las salidas. A pesar de que son mínimos, estos cambios han aumentado la aceleración y el rendimiento del RX-8, y le han proporcionado incluso mayor capacidad de respuesta al pedal del acelerador: un rasgo distintivo del motor rotativo y del RX-8.
Para conseguir esta dinámica sofisticada, Mazda emplea el avanzado motor RENESIS (un acrónimo de Rotary Engine Genesis, que viene a significar “Renacimiento del motor rotativo”). El Mazda RX-8 sigue siendo el único vehículo de pasajeros impulsado por un motor rotativo que se produce en serie en el mundo. El RENESIS, que desarrolla una potencia excepcionalmente alta para un motor con aspiración atmosférica, supera a los motores comparables de movimiento alternativo en aceleración, sensación de potencia de reserva y rapidez de respuesta.
El Mazda RX-8 para 2009 se encontrará disponible con un motor de 232 CV acoplado a una transmisión manual de seis velocidades, o con un motor de 212 CV acoplado a una transmisión automática A/T Sport de seis velocidades con cambio integrado en el volante, para una experiencia de conducción estilo F1 (versión no disponible en España).
El motor rotativo del RX-8, que consiste en un rotor triangular que dentro de una cámara de combustión con forma elipsoidal, lleva a cabo con la máxima eficacia los cuatro procesos de admisión, compresión, combustión y escape. El motor RENESIS es increíblemente suave, alcanza altas revoluciones (hasta 9.000 rpm, 7.500 rpm en los modelos equipados con A/T Sport) y ocupa menos espacio que los motores de combustión interna tradicionales (es aproximadamente un 60% menor y más ligero que un V6 de potencia similar, y un 40% menor y más ligero que un cuatro cilindros). De hecho, si los ingenieros de Mazda hubiesen elegido un motor de pistones convencional, no se habría conseguido el equipamiento y el estilo que definen al RX-8.
El motor RENESIS, que recoge una experiencia de 40 años en diseño de motores rotativos, dispone de puertos de admisión y escape laterales. Estos puertos de admisión son casi un 30% más grandes que los de sus antecesores, y el tamaño de los de escape es el doble. El aumento de eficiencia logrado al reducir el tiempo de solapamiento de la admisión y el escape y al emplear puertos de admisión y escape mayores permite al vehículo ofrecer un rendimiento de primera clase.
El motor de 1,3 litros con aspiración atmosférica del RX-8 puede parecer diminuto para el ojo inexperto en comparación con las grandes cilindradas de los V8 o los pesados V10 o V12. Sin embargo, la extraordinaria eficacia del grupo turbomotor rotativo, el avanzado sistema de admisión en tres fases y una mariposa electrónica permiten al motor RENESIS desarrollar una potencia suave y lineal a gran escala.
El RX-8 cuenta con una suspensión delantera de doble trapecio de aluminio, por lo que se reduce el peso no suspendido derivado del uso de componentes de acero. Al ir montados en un sub-bastidor altamente rígido, los largos brazos superiores e inferiores garantizan cambios de alineación regulares en las sacudidas y la aceleración de las ruedas delanteras. Todas las ruedas están equipadas con amortiguadores monotubo de gas, diseñados con pistones y válvulas internos de gran diámetro, que ofrecen una excelente adaptación al firme y una conducción suave.
Un sistema de dirección asistida eléctrica de cremallera y piñón transmite al conductor la respuesta de la carretera en la medida justa. En lo que respecta al grado de asistencia, los ingenieros de Mazda han decidido seguir su propio criterio con el uso de un motor eléctrico en lugar de una bomba convencional. Este motor proporciona asistencia adicional a bajas velocidades para facilitar las maniobras de estacionamiento. Igualmente, reduce el grado de asistencia a altas velocidades para una respuesta más precisa y un mejor comportamiento. Y, guardando la coherencia con el resto del desarrollo del RX-8, la cremallera es mucho más ligera y fácil de ubicar que en las direcciones convencionales.
Cinco estrellas en pruebas de choque americanas
En las pruebas de vuelco realizadas por la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), el RX-8 obtuvo una impresionante calificación de cinco estrellas.
Se ha tenido en cuenta la protección de los peatones, ya que el RX-8 está equipado con un capó de diseño “shock-cone” de Mazda, que ante el impacto de un peatón cede más que los capós de diseño estándar, y sin embargo es lo bastante fuerte como para no deformarse con el uso normal.
