Tras varios años consecutivos en los que Audi se ha mostrado muy rentable para el Grupo VAG, la marca se prepara para acometer una inversión de 13.000 millones de euros entre 2012 y 2016, destinada a la compra de inmuebles, la investigación de tecnologías eléctricas e híbridas, y la creación de nuevos centros y modelos.
Entre esos nuevos modelos se cuentan un restyling del A3 ya para el año que viene, un nuevo Allroad Quattro para 2013, una versión híbrida del A8 -podrá circular hasta tres km. por ciudad sin superar los 55 km/h- y la puesta en producción del R8 e-tron, si bien de forma muy reducida hasta confirmar la respuesta positiva de los clientes. Será el primer superdeportivo 100 % eléctrico producido en serie. Hace unas semanas, Audi presentó el proyecto eProduction que, con el patrocinio del Ministerio de Innovación alemán, tiene por objetivo aumentar el conocimiento y las infraestructuras de la marca para la producción de baterías y demás elementos de los vehículos eléctricos.
En opinión de Rupert Stadler, máximo responsable de Audi AG, los buenos resultados de las marcas premium se deben al crecimiento del mercado chino, donde cada vez hay más gente con poder adquisitivo. A pesar de todo, en declaraciones a la Agencia Reuters, Stadler pronosticó un 2012 aún peor que el año que acaba para la industria del automóvil pero, dado que los mercados emergentes van a aumentar la demanda, «no debería ser motivo para caer en el pesimismo».
Audi es líder de su segmento en China y quiere serlo en Estados Unidos -Stadler reveló que se están planteando producir también Audis en Norteamérica-, y basa en el futuro comportamiento del mercado en el Lejano Oriente su objetivo de hacer de Audi el primer fabricante de prestigio a nivel mundial. Esto nos devuelve a la fuerte inversión en nuevas plantas que comentábamos al principio ya que, para sortear las fuertes medidas proteccionistas chinas, Audi produciría dentro de ese país los vehículos que fuera a vender en él.
A partir de febrero, el actual jefe de diseño de Audi, Stefan Siellaf, pasará a encargarse del Centro de Diseño de Volkswagen, dejando al frente de la firma de los cuatro aros a Wolfgang Egger.