Enrique García Ojeda prueba el Peugeot 207 RC

Por dentro y por fuera

El tapón del depósito de gasolina se abre con llave: es un engorro. Los faros adaptativos son de serie… pero no pueden llevar xenón ni en opción.

Los retrovisores plateados del RC son calefactables, y se regulan y abaten eléctricamente. Por tamaño, resultan algo estrechos.

Cada Bridgestone Potenza RE050A en medida 205/45-17 -son muy adecuados- vale unos 230-.

Los antiniebla son de serie. 7.- Según Peugeot, el alerón del techo genera una presión de 25 kg contra el suelo cuando se circula a más de 200 km/h.

La doble salida de escape es el rasgo más identificativo del RC. Es la responsable de que el RC tenga un sonido más rácing que el 207 GT.

El pomo del cambio quema cuando le da el sol, resbala si te suda un poco la mano, es frío en invierno…El climatizador bizona de serie -que muy pocos otros urbanos ofrecen- resulta eficaz y es fácil de manejar.

El navegador incluye este pequeño botón… que te puede salvar la vida: en caso de accidente, envía una señal de auxilio al 112 -teléfono de emergencias-, que localiza tu posición vía satélite. El vano motor es pequeño, pero está bien acabado.

CONDICIONES-DE-LA-PRUEBA Y DEL VEHÍCULO

Km al inicio: 1.480 km Temperatura ambiente: 14º C Presión atmosférica: 929 mbar Peso en báscula: 1.385 kg aprox. Reparto del./tras.: 57/43% Neumáticos: Bridgestone Potenza RE050A (205/45 R17) Presión del./tras.: 2,6/2,6 bar.

Curva de potencia: Lo más destacable es que ofrece más de 190 CV entre 4.500 y 6.000 rpm.

Curva de par: Típica de un motor turbo: bien desde 2.000 rpm y constante hasta 4.500 rpm.

Medidas

Algo mejor que la media…Gracias a que el tamaño de su carrocería supera los cuatro metros -la media en los urbanos es de 3,9 m-, el 207 es uno de los urbanos más amplios. Eso sí, los bacquets delanteros roban bastante espacio en las plazas traseras que, recordemos, sólo están homologadas para dos ocupantes.

Aceleración

¿Qué pasa aquí? Las aceleraciones son lentas: en el 0 a 100 tarda… ¡un segundo más que la cifra oficial! ¿La razón? Tras analizarlo a fondo, parece que la potencia se limita automáticamente en primera y segunda marcha para no dañar la transmisión…

Consumo

Increíble Si hay algo que nos ha impresionado en el 207 es lo poco que gasta: para ir a fondo por carretera, no necesita más de 13 litros de media -lo normal es rondar los 7,5-. Además, su capacidad de depósito está por encima de la media.

Adelantamiento

Poderoso La fuerza del motor es tremenda… por eso, en este ejercicio el RC ‘se luce’. Lo habría hecho incluso más rápido si dispusiera de una caja de cambio con seis marchas que hubiera permitido una mejor respuesta en cuarta y quinta. Con todo, a menos que vayamos en un turbodiesel de más de 200 CV o en un deportivo, no podremos superar al 207.

Sonoridad

Suena algo más de la cuenta El RC resulta algo ruidoso, sobre todo en autopista. En el resto de casos no es molesto, pero circular a 140 km/h con más de 70 db es incómodo y cansado. Con una sexta marcha se reduciría el ruido del motor, pero no es el principal problema pues también se aprecian ruidos aerodinámicos y de rodadura.

Frenada

Podría ser mejor Dado que el RC es relativamente ligero, esperábamos que sus cifras fueran algo mejores a 140 -debería estar más cerca de 72 metros- y a 100 -debería rondar los 37-. Eso sí, por resistencia obtienen una nota bastante aceptable, y la puesta a punto del ABS hace que no sea especialmente intrusivo en conducción deportiva.

Qué debes saber de…

Quién es ..Nació hace 35 años en Los Corrales de Buelna -Cantabria-. Es piloto oficial de Peugeot Sport España y compite con un Peugeot 207 S2000 en el IRC -Intercontinental Rallye Championship-, una especie de antesala del Mundial de Rallyes -WRC-; va segundo.

Su palmarés…Debutó en 1996 con un R-5 GT Turbo. Ganó el Desafío Peugeot en 2000, fue campeón de España de Tierra -dos ruedas motrices- en 2004…

Curiosidades…Hasta hace dos años, su copiloto era… ¡su esposa! Quique tiene un alumno-piloto: se llama Sergio Pérez y compite en

Por fuera, la verdad, es muy parecido a mi GT; en la versión RC, la más potente, sólo cambia la carcasa de los retrovisores -que aquí es plateada-, las llantas de 17″, la doble salida de escape y un alerón trasero un poco más grande. Yo le hubiera puesto algún detalle más porque aunque es bonito… resulta discreto.

¡Qué ‘pedazo’ de asientos! Eso es lo que más te llama la atención al abrir la puerta del RC.

Está equipado con dos bacquets en los que rápidamente te encuentras a gusto y que ofrecen una sujeción excelente -nota de la redacción: la postura mejoraría si los reglajes del volante permitieran colocar el asiento en una posición algo más baja; por otra parte, los laterales de los bacquets sobresalen tanto que los codos rozan contra ellos al cambiar de marcha o al girar la dirección-; además, tienen un mullido bastante cómodo que permite afrontar viajes largos sin cansancio.

El cuadro de mandos es muy parecido al de otros Peugeot, con demasiados botones en la consola central: para el navegador -que cuesta 2.170–, la radio, el climatizador bizona de serie… Por calidad, me parece que está bastante mejor rematado que su antecesor, el 206.

Lo que me ha llamado la atención es que este 207 es el único de la gama -si exceptuamos a la versión descapotable- homologado sólo para cuatro ocupantes, debido al diseño de la banqueta trasera. Por su parte, el maletero ofrece unos buenos 270 litros -eso sí, con rueda de repuesto de emergencia-, cifra en la media de los urbanos.

De camino a una carretera de montaña, el RC me recuerda al GT, aunque existen diferencias importantes entre uno y otro: empecemos por el motor 1.6 turbo de inyección directa, que en el RC desarrolla 175 CV -es el mismo del Mini Cooper S-; su sonido es más grave, más ‘bronco’… ¡a mí me encanta!

También suena un poquito más, y es cierto que, como ocurre en todos los urbanos deportivos, te obligará a forzar la voz para mantener una conversación cuando vayas por autopista…

De todas formas, el ruido pasa a un segundo plano al acelerar a fondo. Entre 2.000 y 4.000 rpm el motor ‘tira’ con fuerza, algo que consigue gracias al turbo.

Hasta aquí no parece mucho más rápido que mi GT -que, la verdad, ya corre lo suyo-, pero en cuanto superas esas 4.000 rpm y hasta casi las 6.000, el RC demuestra tener mucho más carácter… y empieza a hacer valer sus 25 CV de potencia extra: mientras te mantengas entre el ‘4’ y el ‘6’ del cuentavueltas, el RC es claramente más rápido que el GT… y que casi cualquier otro urbano deportivo -Renault Clio Sport, Seat Ibiza Cupra…-.

Pero lo mejor de todo es que, aunque el motor ‘caiga’ de revoluciones, siempre dispondrá de un buen empuje en cualquier marcha; de hecho, comencé la ascensión de un puerto en tercera… y lo coroné sin tocar el cambio ni una vez.

Precisamente, la caja de cambio es lo peor del 207.

El problema no es que sólo cuente con cinco marchas, porque los desarrollos están bien elegidos -aunque una sexta nunca sobra para reducir el consumo y la sonoridad, y ya la tienen rivales como el Opel Corsa OPC o el propio Mini-, sino que el tacto de la palanca que lo acciona es impreciso, algo blando; y tiene unos recorridos tirando a largos.

Llegamos a una zona de la montaña donde se disputa un tramo del rally de Cantabria; aprovecho para ‘curiosear’ el consumo que marca el ordenador de a bordo -de serie- y compruebo que registra una media de poco más de nueve litros; poco para el ritmo que estamos llevando -al límite rondó los 12… ¡tres menos que sus rivales!-.

Respecto al comportamiento del coche, he podido apreciar durante el trayecto que la suspensión es firme, algo lógico en un deportivo de este tipo.

Para un viaje largo éste no es el mejor 207… pero, con todo, no resulta tan incómodo y radical como su antecesor, el 206 RC -¡yo tuve uno!-.

Las primeras curvas muestran a un deportivo que va sobre raíles y que apenas se ‘inclina’; además, la amortiguación tiene la ‘flexibilidad’ necesaria como para que las ruedas siempre estén en contacto con el suelo -de esta forma se evitan ‘botes’, imprecisión en las trazadas o pérdidas de tracción-.

Poco a poco le voy tomando confianza y no tardo en comprobar que este RC es más eficaz que el GT y, al mismo tiempo, más ‘noble’.

Las curvas rápidas las puedes pasar con total facilidad, pues sólo debes preocuparte de ‘apuntar’ bien hacia donde quieres ir a través de una dirección que, aunque está un poco más asistida de la cuenta, es precisa -por cierto, que el volante es demasiado grande… y tiene un aro un poco fino-.

El tren delantero es tu mejor aliado: te obedece sin rechistar y siempre te da la sensación de que eres tú el que lleva al Peugeot, y no al revés; dicho con otras palabras, percibes en todo momento que la situación está bajo ‘control’, y doy fe de que ese control lo tienes tanto sobre suelo seco como en mojado.

¿Y el eje trasero? Pues no tienes que preocuparte en absoluto de él. Aquí sí hay diferencias respecto al GT, donde la parte trasera se muestra más nerviosa y tiende a ‘descolocarse’ con cierta facilidad -¡y ya no digamos en el anterior 206!-.

A los conductores más ‘rácing’ quizá no les guste que sea tan ‘facilón’, que transmita tan pocas ‘sensaciones’ incluso cuando desconectes el control de estabilidad de serie… Sin embargo, yo prefiero que un coche de calle sea efectivo y seguro; para ir ‘de carreras’ ya están los modelos de rallyes o de circuitos…

Ahora, pasamos a los giros más lentos y cerrados; en esta situación es donde el 207 pierde un poquito de eficacia, algo lógico en un modelo de tracción delantera con un motor turbo. Me explico: imagina que quieres salir de una curva acelerando a fondo.

En ese momento, la llegada de tantos caballos al eje delantero hace que el morro tienda a ‘patinar’ un poquito… de forma que tienes que ‘liberar’ algo de presión sobre el acelerador para evitar que el RC se te vaya de frente.

Con todo, me parece que tracciona bien, e incluso esperaba que subvirara más…

¿Y los frenos? Para hacer frente al aumento de prestaciones respecto al GT se han instalado unos discos delanteros de 302 mm -283 en el GT- con buen resultado; además, el tacto del pedal es bueno, no aprecias que se fatiguen tras emplearlos en un tramo largo, y su potencia de frenado es suficiente para un coche de calle.

Por cierto, también he notado que el antibloqueo de frenos ABS tiene un tarado diferente y más acertado que en el GT, donde tiende a actuar muy pronto… y termina alargando la frenada.

La vuelta se acaba. Tengo que dejaros, voy a llamar a Peugeot para que me digan cuándo puedo cambiar mi 207 GT por un RC…

Además, tiene un motor excelente por respuesta, prestaciones y consumo. ¿Lo peor? Sin duda, con diferencia, la imprecisa caja de cambio de sólo cinco velocidades.

Si es mucho para ti…Existe un 207 menos potente y deportivo que el RC: el GT THP de 150 CV. Cuesta 19.250-, alcanza 210 km/h, acelera de 0 a 100 en 8,1 seg. y consume, de media, 7 l/100 km.

Calle vs Carreras…El 207 S2000 con el que compite Quique tiene tracción total, cambio secuencial de seis marchas y un motor 2.0 atmosférico -derivado del que empleaba el 206 RC- de unos 280 CV. Pesa 1.300 kg, cuesta unos 180.000- y se prepara en las instalaciones de BMR -responsable de los coches de Peugeot Sport España- en Villaviciosa de Odón, Madrid.

¿Motor BMW?…El 1.6 turbo de inyección directa del 207 RC está desarrollado por el Grupo PSA -Citroën y Peugeot- y BMW -que lo utiliza en los Mini-. Este motor tiene dos variantes más: una de 150 CV -207 GT- y una atmosférica de 120 CV -207 1.6 y Mini Cooper-.

Rivales…El 207 RC -22.160– tiene cuatro rivales: el Mini Cooper S de 175 CV por 24.400- -más elitista pero más incómodo y caro-, el Opel Corsa OPC de 192 CV y 22.950- -más rápido y delicado de conducir-, el Renault Clio RS de 200 CV por 22.300- -más radical- y el Seat Ibiza Cupra de 180 CV por 20.136e -barato, pero muy veterano-.