Por dentro: gana el Citroën
Detrás, el Picasso ofrece más espacio para las piernas -siete cm- y más anchura -cinco cm-, además de un cm extra en altura. También tiene más maletero: 500 l por 437. En ambos, las plazas traseras son independientes, reclinables y desplazables longitudinalmente. El Scénic es más cómodo para el conductor -su volante no está tan inclinado- y la distrbución de sus mandos es más simple… y lógica. Tanto Renault como Citroën ofrecen una calidad sorprendente: están bien ajustados y emplean unos materiales bastante agradables al tacto.
Por fuera: hay empate
El Scénic es más moderno -es casi dos años más ‘joven’- y ofrece más colores: 12 -dos son gratis, el resto por 458 — frente a los 10 del C4. La principal diferencia radica en las llantas que, de serie, son de 17″ en el Renault -hay unas de 18″ por 400 euros- y de 16″ en el Citroën -no se ofrecen de otra medida ni en opción-. Ambos llevan los paragolpes y retrovisores pintados en el color de la carrocería y faros antiniebla -en los dos, los faros de xenón son opcionales-, y sólo el C4 incluye lunas tintadas de serie -el Renault no las ofrece ni en opción-.
Por bolsillo: gana el Citroën
El C4 Picasso es más barato: 25.020 – frente a los 25.970 – del Scénic -en ambos, con los descuentos oficiales incluidos: 3.500 – en el C4 y 1.200 – en el Scénic-. Los dos están muy bien equipados de serie e incluyen control de velocidad, ESP, sensor de luz y lluvia, freno de mano eléctrico… Eso sí, el C4 añade, de serie, suspensión neumática trasera, control de aparcamiento delante y detrás -sólo posterior en el Renault- y clima de tres zonas; a cambio, el Scénic tiene llave manos libres y cajones bajos los asientos delanteros y traseros.
Por mantenimiento: gana el Citroën
Los precios de las revisiones están muy igualados: así, la primera cuesta 221,43 – de media en el Citroën por 213,56 – del Renault. En ambos, se pasan cada 30.000 km. Las diferencias siguen siendo pequeñas; eso sí, en la mayoría de las piezas analizadas el Citroën es más barato. Por ej., un amortiguador delantero vale 186,46 – en el C4 y 187,13 – en el Scénic; un catalizador, 1.372,20 – y 1.434,54 -, respectivamente; un faro delantero, 302,99 – y 310,37 -; un disco de freno, 202,76 – y 312,50 -…
En marcha: gana el Renault
El 2.0 dCi de 160 CV del Renault tiene una respuesta más contundente por debajo de 1.800 rpm; a partir de ahí, es muy similar al Picasso: empuja de forma suave pero vigorosa. Eso sí, su consumo medio real es superior: ronda los 7,5 l -casi un litro más que el Citroën-. Su cambio manual de seis marchas también es más suave y agradable de manejar. Por chasis, el Scénic es comodísimo y poco ruidoso… aunque, en estos apartados, su rival le gana por muy poquito. A cambio, el Renault resulta más estable y ágil en carreteras de curvas.
Y además…
Seguridad: Ambos obtienen cinco estrellas en EuroNCAP. Eso sí, el Renault consigue mejores notas en choque frontal y en el apartado de la eficacia de las ayudas electrónicas -ESP, por ejemplo-.
Neumáticos: los 215/55-16 del Citroën son unos 40 -/ud. más baratos que los 225/50-17 del Renault -en ambos casos, montando unos Michelin Pilot Primacy HP-.
Tan igual… Ambos modelos ofrecen, de serie, una garantía de dos años sin límite de kilometraje; el precio del seguro es, también, casi calcado: 1.149 – en el Picasso y 1.157 – en el Scénic.
En conclusión…
Citroën C4 Picasso 2.0 HDI 150 Exclusive: cómpralo por precio y espacio.
Renault Scénic 2.0dCi Privilege: cómpralo por cómo va en marcha.
Si no te convencen, mira el nuevo Ford C-MAX
En otoño se pone a la venta la segunda generación del monovolumen compacto del Ford. Contará, entre otras, con una versión 2.0 TDCi de 163 CV que costará 25.000 – aprox. Frente a sus rivales, destacará por comportamiento y diseño.
