Cuando hablamos de exclusividad y lujo en la automoción, una de las marcas que primero se nos vienen a la cabeza es la británica Rolls-Royce. Sus ostentosos modelos reciben generalmente pocas variaciones con el paso del tiempo para preservar ese aire clásico; por ello, el hecho de que uno de ellos se renueve supone una noticia de bastante calado. El próximo en llegar es la octava generación del Rolls-Royce Phantom, cuya comercialización se iniciará a lo largo del próximo año y del que ya podemos ver su aspecto en unas imágenes filtradas en la web.
De hecho, el primero en ´abrir la veda´ con un teaser ha sido el fabricante de Reino Unido, pero lo que seguro no se esperaban es que horas después saliesen a la luz algunas fotos de su catálogo oficial. En él se puede ver claramente el frontal de la nueva creación de Rolls-Royce, así como su interior. En cualquier caso, este nuevo Phantom será presentado en un evento que también servirá para decir adiós a la actual entrega y el cual tendrá lugar el próximo jueves 27 de julio. Además, esta celebración servirá también para repasar la historia de este modelo, con varias décadas a sus espaldas.
Así las cosas, las imágenes que acompañan a esta noticia permiten comprobar lo que ya pensábamos después de ver algunas fotos espía con el Rolls-Royce Phantom cubierto de camuflaje: los cambios estéticos responden a una evolución, por lo que las modificaciones no son demasiado palpables con respecto a su antecesor. Sin embargo, sí que destacan los nuevos diseños de los paragolpes delanteros y traseros, así como los pilotos frontales y posteriores con tecnología LED. Por otro lado, las líneas horizontales que exhibe principalmente dejan todo el protagonismo en la parte delantera al Espíritu del Éxtasis.
A su vez, el interior presume de la elegancia y la calidad de materiales que caracteriza a todos los modelos de Rolls-Royce. Todo está tapizado y el salpicadero de la imagen dispone de una gran parte fabricada en madera. Para terminar, el nuevo Rolls-Royce Phantom utilizará una nueva plataforma realizada en aluminio para aligerar el peso del conjunto. Inicialmente contará con una nueva versión del conocido propulsor V12 de 6.75 litros; no obstante, en un futuro próximo Rolls-Royce podría comercializar una variante híbrida.
